Las empresas lucenses se abren a la acción social en plena crisis económica

Reparto del menú en un comedor social. EPL
photo_camera Reparto del menú en un comedor social. EPL

No es un buen momento económico para nadie. Tampoco para las empresas, pero cada vez hay más gente en situación de necesidad y el empresariado se está implicando en la acción social para dar respuesta a esa demanda. Cáritas, una de las ONGs con más presencia en Lugo y más valorada, ha logrado en sólo dos meses el compromiso de colaboración de una quincena de empresas, y una decena de ellas ya la ha concretado.

No es la única iniciativa que ha echado a andar en los últimos meses. La Confederación de Empresarios de Lugo (CEL) ha puesto en marcha por iniciativa propia una campaña de captación de fondos para las obras de restauración de la catedral, en concreto, de la fachada principal, de la capilla mayor y del crucero.

Los trabajos ya han empezado y costarán algo más de 1,1 millones de euros, pero de momento sólo están asegurados los 885.000 euros comprometidos por el Ministerio de Fomento. La patronal lucense ha anunciado que se involucrará para conseguir la parte que falta. La primera acción que llevará a cabo será una cena benéfica el próximo 10 de junio, para recaudar fondos.

La CEL considera que la catedral no sólo es patrimonio religioso, sino que también es uno de los principales valores históricos, artísticos y turísticos de la ciudad, por lo que es un elemento clave en su historia y en su futuro, sostiene.

Pero la implicación social del empresariado lucense va más allá de acciones colectivas y de ciudad. Hay firmas que llevan tiempo colaborando con aquella parte de la sociedad lucense que más lo necesita -personas discapacitadas, población inmigrante, desempleados...-, y en los últimos meses la cifra ha ido a más, algo en lo que está teniendo mucho que ver Cáritas.

La ONG ha puesto en marcha un programa, ‘Empresas con corazón’, que funciona desde hace años en Barcelona, con el que busca implicar todavía más a esta parte de la sociedad. «Hasta ahora no se acudía mucho a ellas, pero es que las necesidades han aumentado mucho. El año pasado Cáritas prestó ayuda, de un tipo u otro, a más de 5.000 personas. El aumento ha sido progresivo desde 2008, aunque parece que se está estabilizando un poco», explica el director de la ONG, Ginés Plaza.

‘Empresas con corazón’ se apoya en un equipo formado por media docena de voluntarios que coordina Santiado Díaz de Freijo y cuya principal función es informar a los empresarios del funcionamiento y de las necesidades de Cáritas para analizar conjuntamente de qué forma pueden colaborar con la ONG. Se trata de un trabajo que los voluntarios llevan a cabo en su tiempo libre, de forma individualizada y cara a cara, y que está teniendo muy buena respuesta, «mejor incluso de lo que esperábamos», afirma Díaz de Freijo.

«En dos meses nos hemos entrevistado con una treintena de empresas, con algunas varias veces, y la respuesta ha sido muy buena. Más de la mitad han respondido favorablemente y un tercio ya han concretado los donativos», explica el coordinador de ‘Empresas con corazón’.

Cáritas ha reunido por esta vía unos 5.000 euros en metálico; material escolar por 2.500 euros, y otras aportaciones en especie, como dos camas de hospital, 500 litros mensuales de leche y servicios de diseño gráfico, formación e informática, entre otros. «Estamos viendo que muchas empresas preferían no donar a aportar una cantidad que consideraban pequeña, pero lo que tratamos de hacerles ver es que no hay nada que sea poco, ni en dinero, ni en tiempo, ni en especie. 100 euros es mucho dinero», asegura Díaz de Freijo, que recuerda, además, que las empresas que donan tienen beneficios fiscales.

PARO

  • De 300 personas lograron empleo 16. Cáritas lleva tiempo advirtiendo de que el perfil de la persona que acude a la ONG en busca de ayuda está cambiando. Si hace unos años eran fundamentalmente inmigrantes, ahora acuden lucenses que se han quedado en el paro y han agotado las prestaciones sociales. Por el servicio de inserción laboral de la ONG pasaron 300 personas en el 2010, pero Cáritas sólo logró empleo estable para 16. «Antes de cen persoas colocábanse o 30%», indica el director de Cáritas.
  • Recibos para vivir. Cáritas tiene servicios específicos para cada colectivo (mayores, discapacitados, mujer, inmigrantes...), pero en los dos últimos años la demanda más habitual es de ayuda para poder acabar el mes. «Recibos de luz, agua, alquileres, hipotecas... son necesidades que están al orde del día», afirma el director de Cáritas.

COMEDOR SOCIAL.

  • 142 comidas en un día, 102 en casas. El comedor social es uno de los servicios que más ha notado el aumento de usuarios en los dos últimos años. Y sigue creciendo. Desde que se trasladó a Santo Domingo, en el palacio Velarde, la afluencia subió un 30%. «El jueves de la semana pasada dimos 142 comidas: 40 en el comedor y el resto, en casas. Hay gente mayor o enferma que no puede ir y manda a alguien a buscar la comida; familias con niños...», explica Plaza, que, no obstante, destaca que también han aumentado los donantes.

BEATRIZ VARELA, Asín Informática:
''Lo mejor es la diversidad de las aportaciones''

Asin Informática es una empresa que echó a andar hace 25 años como proveedora de material y servicios informáticos y que con el tiempo fue girando hacia centro de formación. Mantiene una estrecha relación con Cáritas desde hace años, por eso fue una de las primeras en sumarse al programa ‘Empresas con corazón’.

«Empezamos como proveedores y, una vez conocimos la labor que hacía Cáritas, empezamos a involucrarnos», cuenta Beatriz Varela, gerente de Asin. «Por ejemplo, el precio que dábamos a Cáritas siempre fue diferente».

La implicación fue a más y desde hace un tiempo se está materializando en formación a usuarios de la ONG. «Es una época en la que no hay mucha carga de trabajo, por lo que puedo disponer de algún trabajador. Ya dimos informática básica orientada a la búsqueda de empleo y español para inmigrantes», explica Varela.

Para esta empresaria, uno de los valores del programa es la diversidad de las aportaciones que pueden hacer las empresas. «Muchas veces los empresarios no podemos comprometer una cantidad fija, porque no sabes cómo van a ir las cosas, pero podemos hacer otro tipo de colaboración que económicamente no supone gran cosa», resume.

DIONISIO PÉREZ, de Limpergal:
''
Informamos aos clientes da colaboración coa ONG''

Limpergal es otra de las ‘Empresas con corazón’ de Cáritas. La firma siempre tuvo una acentuada política de responsabilidad social, afirma su gerente, Dionisio Pérez.

La firma colabora en varios ámbitos: la lucha contra la exclusión social, a través de Cruz Roja; el apoyo a otros países en situaciones críticas, por medio de Médicos sin Fronteras, y la erradicación de la pobreza, a través de Cáritas.

A Cáritas Lugo destina un porcentaje de la facturación anual del grupo que lidera Limpergal. «Hai algunhas empresas do grupo que traballan noutras provincias, pero a donación é para Cáritas Lugo porque o capital social é de Lugo», explica Pérez.

Limpergal no ha bajado la colaboración a pesar de la crisis. «A participación en accións sociais non arruína a ningunha empresa. Escudarse na crise é unha xustificación de mal pagador. O que hai que facer é abrir campos, mercados..., porque o modelo cambiou. Isto non é unha situación puntual», opina el empresario.

La firma informa de su colaboración social tanto a los trabajadores como a los clientes. «Non é co ánimo de presumir, pero na factura indicamos a porcentaxe que vai destinada a ONGs».

JUSTO JORGE LÓPEZ, de Polusa:

''É bo que che digan como axudar, ás veces non sabe''

Polusa es uno de los pocos hospitales de España con política de responsabilidad social empresarial, asegura su director gerente, Justo Jorge, por lo que fue suficiente que Cáritas le presentase su programa ‘Empresas con corazón’ para que empezara a colaborar con ONG.

«Foi Santiago Díaz de Freijo, coordinador do programa e membro do noso equipo, quen nolo explicou. E paréceme moi importante ese traballo de divulgación porque ás veces ás empresas non se nos ocurre como podemos colaborar. É bo que cho recorden», explica Jorge.

Polusa inició su colaboración con Cáritas con una aportación anual de 500 euros y la donación de dos camas articuladas. «Compramos camas automáticas e deixáramos algunha das outras de reserva, polo que decidimos dar dúas. Non son automáticas pero son moi boas, poden prestar moi bo servizo», asegura el director de Polusa.

Para Justo Jorge, la decisión de colaborar con Cáritas responde a que su trabajo es serio, visible y cercano, afirma. «Hai tantas ONGs que ás veces non sabes moi ben por cal apostar, pero con Cáritas non hai ningunha dúbida de que o que se entrega vai ben repartido. O comedor social e o roupeiro son dous exemplos».

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