La Universidad de la vida

Agustín García Pinal (Foto: Xesús Ponte)
photo_camera Agustín García Pinal (Foto: Xesús Ponte)

SOY de los que creen que el aprendizaje más importante nos lo dan las experiencias vitales y, sobre todo, las personas con las que nos cruzamos. Y para los que hemos estudiado en la Politécnica del Campus de Lugo, Agus, Balbi, Pepe y Lucha son parte de la vida en la Universidad pero, más importante aún, de la Universidad de la vida: su cafetería, que solo era un negocio familiar, se convirtió en nuestra segunda casa.

Agus es un maestro manejando un recurso tan limitado como el tiempo. Me demostró que hay tiempo para todo porque, además de para comentar la prensa mientras me preparaba el café en sus jornadas laborales interminables, siempre le quedaba un hueco para los amigos, para echar un pádel conmigo, para arbitrar partidos de juveniles y para colaborar con los chavales del equipo de la Residencia.

En una sociedad donde cada vez hacemos más cosas y tenemos menos tiempo para ellas, valoro especialmente a gente como él, que siempre se preocupa por ayudar a los centenares de personas que hemos pasado por su establecimiento.

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