Muchos comensales y poca comida. Así se podría resumir el panorama que se presenta cada semestre en Lugo, coincidiendo con el reparto de la ayuda alimentaria procedente de la Unión Europea, que realizan la asociación Dignidade y Cruz Roja.
Los alimentos enviados por Europa disminuyeron considerablemente el último año mientras que la crisis económica está conduciendo, en cambio, a un mayor número de familias lucenses a pedir ayuda alimenticia a distintas organizaciones. Los datos ofrecidos por Dignidade hablan por sí solos y confirman que el año pasado la ayuda procedente de la UE fue casi la mitad de la recibida el año anterior.
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