La jueza Pilar de Lara ha organizado para esta mañana la declaración de la testigo protegida cuyo testimonio dio origen a toda la operación Carioca. Se trata de una preconstitución de prueba: es decir, se convoca a todas las partes a esta comparecencia como si fuera ya el juicio oral, por lo que la mujer tendrá que responder a las preguntas tanto de las defensas como de las acusaciones, así como de la Fiscalía.
La magistrada ordenó esta comparecencia ante el riesgo de que la mujer, de nacionalidad brasileña, regresa definitivamente a su país y no pueda comparecer cuando se celebre la vista oral, algo que todavía puede demorarse incluso un par de años.
Esta mujer fue la que denunció que, cuando ejercía la prostitución en Lugo, sufrió abusos sexuales por parte de cabo de la Guardia Civil imputado. Luego, fue expulsada a Brasil en cumplimiento de una orden de expulsión que, aunque era legal, se llevó a cabo con una celeridad bastante sorprendente.
Otra curiosidad es que, al parecer, mientras estaba en Brasil y esperaba a poder regresar a España recibió varios envíos de dinero por parte del policía judicial de la Guardia Civil que ha realizado las investigaciones, el mismo que tomó la primera declaración a esta mujer, compañero del cabo acusado.
