Delegados sindicales de CC.OO. y CIG cortaron ayer el tráfico, a última hora de la mañana, durante diez minutos en la Ronda da muralla, a la altura de la puerta de Bispo Odoario, lo que ocasionó importantes atascos. La protesta, que arrancó frente a la sede de la Consellería de Sanidade en la Rúa Montevideo, estaba motivada por el recorte que tiene previsto aplicar la Xunta en el servicio de ambulancias.
Marcos Pérez de CC.OO. advirtió de que los recortes en el 061 abocarán a que se preste un servicio «precario» que «no podrá garantizar la asistencia y pondrá en peligro la vida de las personas».
Este sindicalista indicó que los servicios que se prestan actualmente, antes de que se aplique el recorte, «incumplen las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Ministerio de Sanidad».
Foz
La localidad lucense más afectada es Foz, en donde se suprime la ambulancia asistencial nocturna del 061, lo que ha supuesto el despido de sus dos trabajadores.
Este asunto se abordó en un pleno municipal celebrado ayer en Foz. El PP, con el alcalde Javier Castiñeira al frente, se quedó solo al defender el recorte de este servicio. Los tres partidos de la oposición, Unifoz, PSOE y BNG, mantienen una postura en contra de esta medida del Sergas, que se ejecutará a partir de mañana.
En un salón de actos abarrotado, la oposición mantuvo un mismo discurso, solicitó que el servicio esté activo las 24 horas del día. Castiñeira alegó que los tiempos de actuación se mantendrán como hasta ahora a través de un servicio coordinado, pero los otros tres grupos tiraron de matemáticas: doce horas menos de una ambulancia.
Tras el pleno una comisión vecinal se reunió con el alcalde para solicitar una entrevista con la conselleira de Sanidad la próxima semana. Si no aceptaba tenía intención de encerrarse anoche en la Casa do Concello.
