Un comercial con iniciales F.J.F.G. se enfrenta a una pena de tres años de prisión por cobrar supuestamente varias facturas de bebidas en los clubs de la operación Carioca y quedarse con el dinero.
El propietario de los establecimientos, J.M.G.A. -que se encuentra encarcelado fuera de Galicia porque tiene prohibido acercarse a la comunidad- regresó ayer a Lugo para prestar declaración como testigo. El dueño de los clubs testificó esposado y saludó al acusado en la sala con un apretón de manos antes de ser conducido nuevamente a prisión.
Según se recoge en el escrito de conclusiones del fiscal, el acusado, de 41 años, desempeñó funciones de comercial para un almacén de bebidas de Lugo durante unos diez años, hasta julio de 2008. En el desempeño de sus funciones, el hombre cobró dinero en efectivo de las facturas correspondientes a los meses de febrero a mayo de 2008 por los suministros efectuados al club Queens y por la factura de abril de 2008 correspondiente a La Colina, «quedándose con el importe, sin reintegrarlo a la empresa para la que trabajaba». El fiscal mantiene que el acusado se apropió así de unos 13.000 euros.
El acusado, por su parte, aseguró que le entregó todo el dinero al jefe, «ya que si no pagaba un mes no dejaba entregar la mercancía del mes siguiente». En este sentido, dos repartidores de la empresa confirmaron que el jefe les había dicho en varias ocasiones que no llevaran los pedidos los locales hasta que estuviera pagada la factura del mes anterior, «por lo que es imposible que siguiéramos repartiendo si el comercial no hubiera entregado el dinero en la empresa», afirmaron.
Además, explicaron que la empresa nunca les daba un justificante cuando entregaban el dinero que cobraban a los clientes, por lo que el acusado no podría demostrar la entrega de la cantidad que se le reclama. El juicio por estos hechos quedó visto para sentencia en el Penal 2.
