Juzgado por meterle un pañuelo en la boca a su mujer y agredirla

El ministerio fiscal solicitó una condena de cuatro años de cárcel para A.F.F., acusado de maltratar a su esposa y meterle un pañuelo mojado en la boca para que no pudiera gritar. Tal y como se recoge en el escrito de conclusiones provisionales del ministerio público, el hombre insultó y agredió a su esposa en múltiples ocasiones, siempre en el interior del domicilio familiar, ubicado en la capital lucense.

Concretamente, el 9 de septiembre de 2008, el hombre llegó a su casa y comenzó a insultarla y a menospreciarla con frases como: «Cuando vienen las personas se marchan las putas». En ese momento, la mujer le dijo que no estaba «a gusto» y que lo mejor era separarse, a lo que el acusado reaccionó supuestamente de forma violenta. La acusación pública mantiene que el hombre la agarró por el cuello, rompiéndole la cadena y la ropa, y le golpeó la cabeza contra la pared. Acto seguido, cuando la mujer intentó pedir auxilio, le metió un pañuelo mojado en la boca.

Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió múltiples hematomas en diferentes partes del cuerpo y tardó una semana en recuperarse. Además, a raíz de la situación vivida, sufrió un «trastorno adaptativo mixto, ansioso y depresivo», por lo que tuvo que seguir un tratamiento con ansiolíticos durante tres meses.

Tras denunciar los hechos, el juzgado de instrucción número 3 de Lugo prohibió al acusado aproximarse a menos de 500 metros de su esposa o comunicarse con ella por cualquier medio. Sin embargo, el 24 de noviembre, el acusado la llamó desde una cabina telefónica.

El juicio por estos hechos se celebró ayer en el Penal 2 de Lugo después de que el acusado no quisiera reconocer los hechos y llegar a un acuerdo con el fiscal.

Robos

El Penal 2 acogió ayer otros dos juicios por robo. En uno de ellos, el fiscal pidió un año de cárcel para J.L.B.V., acusado de forzar la puerta de entrada de un almacén ubicado en la Rúa San Roque, aunque no logró apoderarse de ningún objeto.

Por otra parte, el juzgado impuso sendas penas de un año de cárcel -a sustituir por 360 días de trabajos sociales- para A.P.G. y P.R.M., juzgados por entrar en un alpendre de la Rúa Finisterre y apoderarse de una puerta de aluminio y veinte ventanas de aluminio con cristales.

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