El Penal número 1 de Lugo celebró ayer un juicio contra un lucense acusado de meterle el dedo en la boca a su novia y apretarle el cuello, hasta la chica empezó a sangrar. El acusado -que se enfrenta a dos años de cárcel- negó ayer los hechos durante la vista oral y aseguró que fue la joven quien le pegó dos bofetadas, ya que se enfureció porque recibió un mensaje de una amiga, «con la que había tonteado antes de estar con ella» dijo.
El fiscal explica que los hechos ocurrieron el 10 de febrero de 2012, sobre las cuatro de la tarde, cuando el acusado discutió con su novia en el domicilio que ambos compartían. En el transcurso de la discusión, el hombre le introdujo el pulgar de la mano derecha en la boca y presionó con fuerza, mientras que con la otra mano le oprimía el cuello. El hombre sólo la soltó cuando vio que la mujer sangraba por la boca.
El acusado, sin embargo, negó el ataque y explicó que intentó sujetar a la chica para que no le pegara, «con la mala suerte de que le arañé en la boca y sangró un poco», dijo.
