Las decenas de clientes que en la noche del viernes al sábado pasados se encontraban en el club de alterne Ladies de Robra y en el Tritón de Santa Marina se llevaron un buen susto cuando irrumpieron guardias civiles para realizar una redada. La sorpresa fue todavía mayor cuando se enteraron de que los agentes iban además acompañados por inspectores de Trabajo y de la Agencia Tributaria.
Está previsto que este tipo de operaciones mixtas entre fuerzas de seguridad y cuerpos de inspección de la administración central se repitan a partir de ahora en más burdeles de la provincia de Lugo. Además del Ladies y el Tritón, el pasado fin de semana también se llevó a cabo en alguno de A Mariña.
Los inspectores de Trabajo centraron sus pesquisas en la situación laboral en la que se encuentran el cerca de medio centenar de mujeres que prestan sus servicios en estos locales, la mayoría procedentes de Latinoamérica y Europa del Este.
