Los 59 días de huelga en el servicio de recogida de basura y limpieza viaria que padeció la capital lucense el pasado verano siguen trayendo consecuencias. Tres empleados de la empresa concesionaria, Urbaser, comparecieron ayer ante la titular del juzgado de instrucción número tres de Lugo en calidad de imputados por un delito contra los derechos de los trabajadores.
La comparecencia ante la magistrada Estela San José fue a raíz del atestado que levantaron las fuerzas del orden el pasado 18 de julio porque los imputados presuntamente llamaron «esquiroles» y profirieron insultos en plena vía pública a los operarios que desplazó la empresa desde otras ciudades para reforzar el servicio de recogida de basura.
