La sede del grupo El Progreso se llenó ayer de bullicio y entusiasmo infantil con motivo de la entrega de los Premios Muralla, que el periódico decano de la prensa lucense convoca desde hace 14 años entre niños de hasta doce años de edad. Ganadores y finalistas, junto con sus profesores y familiares, acudieron a recoger sus galardones, un reconocimiento al talento y al trabajo por el que cada vez pugnan más escolares gallegos.
La presidenta del grupo El Progreso, Blanca García Montenegro, presidió el acto de entrega, en el que mostró la satisfacción que proporciona observar, a través de los dibujos y redacciones, los valores de quienes tomarán las riendas en un futuro. «Los trabajos que se presentan a los premios nos dicen cómo va a ser nuestro futuro, que sois vosotros, y vemos que sois sensibles, que tenéis curiosidad y mucha imaginación. Nos quedamos tranquilos porque vemos que este país va a estar en buenas manos», indicó.
García Montenegro, para quien la entrega es siempre una jornada «distinta y alegre» también subrayó la creciente participación de alumnos y centros de toda la comunidad gallega en estos premios, que se crearon con motivo de la declaración de la muralla Patrimonio de la Humanidad y que se consolidan año tras año.
La presidenta del grupo El Progreso tuvo elogios para todos los participantes: «Todos los que estáis aquí sois ganadores», apuntó, aunque matizó que la mecánica del certamen exige que sean solo dos, en las categorías de dibujo y redacción, los que se lleven un primer premio.
Del mismo modo, el alcalde de Lugo, José López Orozco, ofreció el discurso de clausura, con elogios para los premios que organiza El Progreso porque ayudan a los lucenses a recordar «o que é o noso símbolo, a muralla», así como la importancia de una ciudad que fue una de las siete capitales del Antiguo Reino de Galicia y la más antigua de «aquela Gallaecia que celebraremos co Arde Lucus».
El regidor no quiso, sin embargo, recrearse únicamente en el pasado y alabó la capacidad de estos premios de unir «a tirios e troianos para facer o Lugo que queremos mellor aínda», indicó el alcalde, que recalcó que la muralla es «patrimonio da humanidade, polo tanto é de todos, por iso temos que coñecela, querela e conservala».
Entre los asistentes, se encontraba un grupo de doce niños procedentes de Cambados, miembros del club de lectura L-emos de la Biblioteca Municipal de esta localidad. Ellos, con un trabajo colectivo que compusieron como una tormenta de ideas, fueron finalistas en la categoría de redacción y el Ayuntamiento cambadense aportó un autobús para que pudieran venir a recoger el premio.
«Primeiro motivounos a viaxe a París, pero pensamos que aínda que gañaramos non podíamos ir todos, pero os rapaces dixeron que polo menos podíamos coñecer Lugo e decidmos participar», indicó su monitora, María Vázquez.
PREMIOS
Los premios fueron entregados por la presidenta del grupo El Progreso, el alcalde, la delegada de la Xunta, Raquel Arias, el delegado de cultura de la Diputación, Mario Outeiro, y la concejala de cultura, Carmen Basadre.
Los ganadores, Aroa Lombardía, en la categoría de redacción, y Alberto Ferro Vázquez, en dibujo, recibieron 500 euros en metálico y un viaje a París para tres personas. La tutora de Alberto, María Rosa Santos, obtuvo una cámara digital, pero este premio quedó desierto en redacción porque Aroa se presentó de forma individual. Además, los colegios ganadores por el grupo de trabajos presentado -el Ceip Manuel Mallo de Nadela, en redacción, y el Ponte de Doiras, en dibujo- obtuvieron un equipo informático cada uno. Los finalistas, por su parte, recibieron un lote de libros.
