La Confederación Hidrográfica no ha dejado de ser noticia en los últimos meses en Lugo debido a algunas de sus decisiones, como el informe favorable a una gasolinera en Carrefour, o por los problemas que afectan al río, como la azolla. Su presidente aborda estes y otros temas.
La confederación Hidrográfica tiene varios frentes abiertos en Lugo. El más reciente, el informe favorable para la construcción de la gasolinera de Carrefour, en contraposición con la playa fluvial.
Esto hay que explicarlo muy bien, porque yo de lo que estoy en contra es de la demagogia, y los responsables públicos tenemos que decir las cosas en su justa medida. La Confederación, de acuerdo con la legislación que tenemos, tiene la competencia en el cauce. La playa fluvial es perfectamente autorizable. Si hubiera sido la playa en sí, no hubiera habido ningún problema. El tema es que llevaba unos pantalanes, que entran en el río. La Dirección General de Evaluación y Calidad Ambiental, a la vista de las consultas que hizo (al Ayuntamiento, la Diputación, grupos ecologistas, la Dirección Xeral de Conservación da Natureza...) decidió que ese proyecto se sometiera a evaluación de impacto ambiental. Aproximadamente en abril de 2013 lo comunica al promotor, que es la Diputación, y a nosotros. Si lo hubiera presentado, lo más probable es que se hubiera autorizado la playa. Lo que no podemos decir es que no es autorizable la playa. No, mire, desde el punto de vista del plan hidrológico, la playa es autorizable, lo que necesita usted es presentar un estudio de impacto ambiental de unas instalaciones que va a hacer en una zona que es Red Natura y está protegida.
¿Hubo falta de gestión?
Pero si eso ya lo hemos dicho hasta en
