El grupo popular calificó ayer de «arcaico» el funcionamiento de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (Omic), ya que, según la concejala Raquel Castiñeira, se hacen «a mano tanto la apertura, la tramitación como la resolución de expedientes y lo mismo ocurre con las estadísticas», señaló.
La edil popular reclamó en rueda de prensa la modernización del servicio con la implantación de un sistema informático, así como el refuerzo del personal para evitar una rebaja en la calidad de la atención, ya que explicó que uno de los trabajadores de la oficina está a punto de jubilarse. «No se trata de contratar a más gente, simplemente pedimos que se reorganicen los distintos departamentos que dirige Francisco Fraga», dijo Castiñeira en alusión al concejal de servicios generales.
La popular asegura que el único trabajador que quedará en la Omic deberá tramitar los expedientes, atender al público en persona y vía telefónica, además de emitir las tarjetas oro y platino para los vendedores de plazas y mercados.
Bolardo
El también concejal del PP Antonio Ameijide reafirmó ayer su denuncia sobre los bolardos instalados en los accesos a la Praza de San Marcos. El popular insiste en que no es operativo que se tengan que desmontar los postes cada vez que los vehículos de emergencias precisen acceder a la vía. «Se necesita una media de entre ocho y diez minutos para retirarlos», explicó el edil, quien añade que ese tiempo es primordial. «Cómo se le explica a un enfermo el retraso de diez minutos de una ambulancia» , ejemplificó.
