El PP lucense hizo balance ayer de la gestión municipal durante el año que acaba de finalizar y solo salvó la aprobación del 95% del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). «Rematamos 2011 con máis problemas cós que empezamos», afirmó el portavoz popular, Jaime Castiñeira. «Un ano máis temos máis do mesmo e dos mesmos, a pesar de que os lucenses apostaron polo PP para gobernar Lugo», añadió.
Castiñeira cree que el único logro municipal del último año es que Lugo tiene al fin un nuevo plan de urbanismo -entrará en vigor en las próximas semanas-, aunque solo para el suelo urbano, ya que la Xunta pidió cambios en el 5% restante en la primavera pasada y todavía no se ha empezado a revisar el documento, lamentó el edil.
Castiñeira afirmó que en 2011 el Concello de Lugo se hipotecó más, aumentó su gasto corriente, las colocaciones a dedo, la privatización de servicios y la inseguridad, dijo.
El portavoz popular afirmó que el Concello tiene suscritas deudas hasta el año 2059 y afronta el 2012 con un presupuesto que en su opinión están inflados en, como mínimo, 2,1 millones, lo que podría obligar a revisar a la baja las partidas de ingresos y gastos.
El PP criticó en general la gestión económica del Concello de Lugo. Habló de «despilfarro» y citó como ejemplo el Museo Interactivo da Historia de Lugo (MIHL), la Casa da Xuventude y la cafetería del parque Rosalía de Castro. Frente a esto, la inversión en otros conceptos, como la atención a la zona rural, baja hasta un 40%, denunció Castiñeira, que también critió la aparición de facturas de ejercicios anteriores pendientes de pago. Asimismo, volvió a advertir de que, si se crea una empresa mixta para gestionar los servicios del agua, el coste del recibo para los ciudadanos se triplicará, aseguró Castiñeira.
El concejal criticó también la progresiva externalización de servicios municipales y afirmó que el Concello lleva años siendo una agencia de colocación del PSOE.
En otro ámbito, Castiñeira afirmó que Lugo dejó de ser la icudad segura que era. «O alcalde non foi quen de regularizar a situación da Policía Local. Agora anúnciase unha nova reestruturación porque Orozco viuse obrigado por sentencia a volver á situación de 2004», afirmó Castiñeira.
Por último, el portavoz popular fue también muy crítico respecto al trato que el gobierno local da a la oposición, «especialmente o PSOE», dijo, aunque también acusó al BNG de convertir actos institucionales en partidistas y citó como ejemplo la última ofrenda a Rosalía de Castro.
