El gobierno local estudiará la viabilidad económica de hacer un nuevo acceso al barrio de San Lázaro desde el puente nuevo. La vía está proyectada en el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), parte de la glorieta que hay al final del viaducto y desemboca al lado del colegio de A Ponte.
Esta fue la carta que sacó de la manga el alcalde, José López Orozco, en la reunión que mantuvo ayer con representantes de las asociaciones de empresarios y de vecinos de A Ponte para abordar el futuro del puente romano.
El regidor no aclaró si el viaducto original será peatonal una vez acabe la rehabilitación, la opción que más gusta al gobierno local y a él mismo, como manifestó la semana pasada en el pleno, y que cuenta con el rechazo de los empresarios y de buena parte de los vecinos de San Lázaro. López Orozco insistió en que su deseo no es perjudicar al barrio y que buscará alternativas de circulación y los empresarios salieron razonablemente satisfechos de la reunión. «No nos lo dijo con esas palabras, pero entendemos que, hasta que no haya una alternativa, nos van a dejar circular por el puente romano», afirmó esperanzada Sandra Raposo, presidenta de la recién constituida Asociación de Empresarios del Barrio de A Ponte. «El alcalde bajó en los últimos días por el barrio y vio que lo que pedimos no es un capricho, que el puente nuevo no quedó bien comunicado, por lo que todo lo que sea mejorar, en principio nos parece bien», afirmó Raposo. Con la asociación de vecinos no fue posible contactar.
