La cafetería que daba servicio al complejo docente, como se conoce al edificio que acoge la facultad de Humanidades y las escuelas universitarias de Enfermería y Relacións Laborais, cerró sus puertas el pasado mes de noviembre, por lo que estudiantes y docentes de estos centros llevan desde entonces sin este servicio.
La Universidade de Santiago no ha aclarado qué motivo alegó la concesionaria para abandonar este local ni tampoco cuándo volverá a salir a concurso la concesión para que otras empresas puedan optar a continuar con esta actividad.
