El comercio defiende la ORA para poder aparcar

La saturación del tráfico y la falta de aparcamiento son dos eternos problemas en la avenida da Coruña. La asociación de comerciantes defiende la implantación de la zona Ora para evitar que los conductores ocupen plazas durante todo el día o durante muchas horas. Esta medida permitiría una mayor rotación en los aparcamientos y favorecería al comercio. La propuesta es vista con buenos ojos por el Ayuntamiento, pese a que no tomó ninguna iniciativa, pero crea reticencias entre vecinos de la zona que plantean la creación de una plataforma.

La junta directiva de la asociación de comerciantes entiende que la medida debe ejecutarse, «al menos de forma temporal hasta que la vía no sea unidireccional o se creen zonas de aparcamiento para aliviar la circulación», asegura su presidenta, Encarna Calaza.

Los coches y las furgonetas son una herramienta de trabajo para el pequeño comerciante «y aquí no hay zonas para aparcar. El parque automovilísitico aumentó muchísimo y la previsión de infraestructuras en la zona no se corresponden con este crecimiento», afirma. El hecho de contar con una zona Ora facilitaría espacios de párking que beneficiaría tanto a comercios como clientes.

Además se evitarían abusos, como la presencia de una veintena de coches, abandonados e incluso para compraventa particular, «que se encuentran estacionados de forma permanente en varias calles del entorno de la avenida», según el gremio de comerciantes.

«La implantación de la Ora se atiende a las necesidades recaudatorias de la empresa que lo gestiona. Alguna reivindicación del comercio puede ser justa, pero entendemos que una de las partes, la de los ciudadanos, quedó al margen, y también debe ser escuchada », explica un residente en la avenida. Otros ya se dirigieron a la asociación de comerciantes para comunicarles la creación de una plataforma con el fin de presionar para evitar la adopción de esta medida.

Otra de las posibles soluciones pasa por la creación de un párking subterráneo en el parque de A Milagrosa. No es una época propicia para una inversión de esta índole. Pese a ello, la asociación de comerciantes defiende la redacción de un estudio y la firma de un convenio de financiación que permita a los comerciantes adquirir allí plazas de estacionamiento a un precio asequible. «Tendríamos que estudiar la forma de llegar a un acuerdo entre el sector comercial y la administración que busque la implicación de ambas partes», indica Calaza.

En la avenida se creó recientemente un párking subterráneo, pero Encarna Calaza considera que es «insuficiente» para solucionar el problema, sobre todo porque el pequeño comercio «no tiene márgenes, en esta época de crisis, para ocupar una o varias plazas».

UNIDIRECCIONAL.
Otra eterna asignatura pendiente de la Avenida da Coruña es su reconversión en vía unidireccional. «Es un proyecto que planteamos por activa y por pasiva, pero el Ayuntamiento nunca tomó cartas en el asunto», afirma Encarna Calaza.

La Ronda Norte puede considerarse un primer paso para aliviar el tráfico de la zona, pero no deja de ser una solución menor, ya que el tráfico entre la antigua Frigsa y la Ronda da Muralla es muy intenso. La descongestión de la circulación en este área pasa por el desdoblamiento de la Avenida Infanta Elena y la construcción del vial que unirá Paradai con la estación del tren.

Los comerciantes defienden que se reconviertan en unidireccional al menos hasta el barrio Feijóo, como estaba previsto en principio. «La avenida debe ser unidireccional como lo es Camiño Real, aunque para ello habrá que esperar a que se ejecuten actuaciones alternativas», dice Calaza.

Aunque la densidad circulatoria se mantiene, la avenida de A Coruña es cada vez menos utilizada como acceso para entrar en Lugo por el elevado número de semáforos.

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