El campus de Lugo recibió el año pasado 95 alumnos brasileños dentro del programa Ciência sem fronteiras; este año, sin embargo, solo ha llegado uno. La iniciativa del gobierno brasileño representaba una oportunidad de oro para que los centros receptores -la Escuela Politécnica y la facultad de Ciencias- incrementaran sus cifras de matrícula, que en algunas titulaciones son deficitarias. Las expectativas, sin embargo, se han venido abajo porque un trámite introducido en la convocatoria de este curso ha alejado a los alumnos de Lugo y de otras universidades españolas.
En esta ocasión, los aspirantes que no tuvieran ya un certificado de nivel B1 de español debían presentarse a unas pruebas del Instituto Cervantes que solo podían hacerse de modo presencial en uno de los ocho centros que la institución tiene en el país, lo que, en muchos casos, obligaba a grandes desplazamientos a quienes estaban interesados, que desistieron de solicitar una plaza en España.
México es mayoría este año
El centenar de alumnos extranjeros que este curso realizará estudios en el campus este curso recibió ayer la bienvenida oficial en la facultad de Humanidades. Proceden de nueve países europeos, además de Brasil, Argentina y México. De este último llegan cuarenta jóvenes, que se han matriculado principalmente en la Escuela Politécnica y en la facultad de Administración de Empresas. Otro de los centros que más extranjeros recibe es la facultad de Humanidades.
