El grupo municipal del BNG considera necesario realizar una redacción más concreta de la ordenanza de contaminación acústica, ya que considera que «en moitos casos pode levar a unha aplicación arbitraria da mesma», explicó la concejal Paz Abraira.
Los nacionalistas ponen como ejemplo de esta inconcreción la exigencia que tienen de adaptarse a la nueva normativa los locales de determinados negocios cuando se hagan obras y los plazos que se dan. «A actual redacción da norma pode levar a diversas interpretacións, xa que non é clara sobre o tipo de obras ou se a adaptación se ten que realizar en 12 meses», comentó Abraira, quien también cree que no es razonable la diferencia de niveles de ruido que se establecen para las zonas industriales y residenciales.