Adrián es un niño de 8 años que padece una parálisis cerebral como consecuencia de la malformación cardíaca con la que nació. Este menor monfortino se está sometiendo a un costoso tratamiento para su recuperación. El Banco de Tapones de Lugo, iniciativa solidaria puesta en marcha por una decena de instituciones y empresas, pondrá su granito de arena para ayudar a su familia, un joven matrimonio en paro, José Miguel García y Libertad Casado, que tiene otro hijo, de 4 años. Las 10 toneladas recogidas para ellos les reportarán 2.600 euros.
Adrián necesita de un andador para desplazarse y no puede hablar, aunque comprende todo lo que le dicen. Su padre dijo que los médicos de la clínica en donde le están tratando les aseguran que «pode chegar a andar valéndose só dunha muleta e que é posible que máis adiante recupere a fala».
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