el balneario de Lugo abrió ayer sus puertas para mostrar todo su potencial y enseñar a los visitantes las últimas excavaciones realizadas en el recinto. El centro ofreció visitas guiadas de media hora por las termas romanas y tratamientos de aguas mineromedicinales.
Una de las visitas más concurridas de la mañana fue la que contó con la presencia y aportaciones de Enrique Alcorta , arqueólogo del Museo Provincial de Lugo.
Los recorridos estaban dirigidos por Martina Gandoy , jefa de recepción, y se pensó en su realización porque «la gente de Lugo no conoce las termas que tenemos y nos dimos cuenta que de las más de 6.000 visitas que recibimos al año, casi todas son de turistas», explicó. El objetivo de dar a conocer el balneario a los lucenses se cumplió, dado que, en palabras de Gandoy, «la gente que vino durante la mañana era de Lugo y alrededores, como Rábade o Conturiz», asegura.
Tras mostrar los restos de termas romanas que se conservan tanto en el exterior como en la planta baja, el final del recorrido llevó a los asistentes a los manantiales, situados en un patio cubierto del edificio. Allí visitaron el pozo romano que hay en la estancia, el cual se conserva con su piedra original y del que mana agua a 43,8 grados centígrados.
Carmen y José son vecinos de A Ponte y se enteraron de la jornada de puertas abiertas «de casualidad, al venir a preguntar por un tratamiento», explica Carmen. La visitante considera que «los lucenses saben que el balneario está aquí, pero no conocen todo lo que tiene dentro», asegura. «Si nosotros que somos de A Ponte y lo tenemos aquí al lado no lo conocemos, cómo lo van a conocer los de ahí arriba», bromeaba su acompañante. Otras dos jóvenes, sin embargo, se enteraron de las visitas guiadas por una noticia de El Progreso y decidieron acercarse a realizar el recorrido y los tratamientos ofrecidos. Consideran que es una «oportunidad única para que la gente que no tiene recursos conozca lo que se hace aquí», explicaron. Tras realizar la vista, calificaron el recorrido de «ameno e interesante, a través de un verdadero museo totalmente desconocido».
