El Auditorio de Lugo costará 20 millones de euros y estará terminado en 2013

El conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, presentó en Lugo el proyecto de construcción del nuevo Auditorio, que se instalará en la zona de Magoi, en unos terrenos cedidos por el Instituto Galego de Vivenda e Solo. El Gobierno gallego licitará las obras después del verano y prevé terminarlas antes de finales del 2013. La inversión total ascenderá a 20 millones de euros, seis más de los previstos inicialmente, debido a las mejoras introducidas en el proyecto, entre las que destacan más de 330 plazas de aparcamiento.

Hernández aseguró que esta infraestructura nace con el propósito de convertirse en un referente del panorama cultural para el Lugo del siglo XXI y remarcó que, para la Consellería de Medio Ambiente, este proyecto es un compromiso importante con la ciudad lucense y sus habitantes, que dispondrán de una infraestructura cultural acorde con su importancia de ciudad en la que radica uno de los monumentos Patrimonio de la Humanidad.

La Xunta firmó un convenio de colaboración con el Concello de Lugo para la construcción del Auditorio, previsto inicialmente en el cuartel de San Fernando, pero dicha ubicación fue descartada por un informe de la Unesco. Así pues, se optó por el Polígono de Aceña de Olga en la zona de Magoi, cedido por el Instituto Galego de Vivenda e Solo.

Esta infraestructura ocupará alrededor de 20.000 metros cuadrados, distribuidos en diferentes salas: una principal, con capacidad para 900 espectadores, y una destinada a la celebración de conferencias y conciertos, con capacidad para 300 personas, así como espacios para actividades teatrales, escuela de música y mediateca, entre otras equipaciones.

Además, habrá un lugar habilitado para usos comunes, con cafetería, guardarropa, aseos públicos y un área de información y venta de entradas. Dentro de su estructura, una zona se destinará a congresos y exposiciones y otra a diferentes labores administrativas.

Todo el edificio hace protagonista a la luz natural, por lo que se proponen ventanas horizontales rasantes, con sistema de escurecimiento, abiertas hacia la ladera ajardinada, buscando la integración de los actos y representaciones en la naturaleza geométrica.

Comentarios