La CIG denunció este viernes que dos incubadoras y una cuna térmica de la UCI de Pediatría-Prematuros pasaron más de quince días en un pasillo del Hospital Universitario Lucus Augusti (Hula), "a la espera de que las llevasen a arreglar", y que ahora se encuentran "en reparación" y todavía no han sido devueltos al centro.
Para el sindicato, lo ocurrido es consecuencia de la decisión del Sergas de privatizar el mantenimiento de los equipos electromédicos, una decisión de la que “está a punto de cumplirse un año”. Desde que se adjudicó el concurso, hace unos siete meses, “en Lugo queda relegado el equipo de profesionales del Hula que se venía haciendo cargo de este servicio y que lo hacía de manera eficiente”.
Desde entonces, se han producido “varias incidencias”, sostuvo Carme Aira Díaz, secretaria comarcal de CIG-Saúde de Lugo y A Mariña. Otra de las mencionadas por la central es que, según el padre de un niño ingresado, una de las incubadoras, “tiene la revisión sin pasar”, de hacer caso a la pegatina que tiene el aparato.
En declaraciones a la agencia Efe, el gerente del área integrada del Sergas en Lugo, Antonio García Quintáns, recordó que el Hula es "un hospital nuevo", en el que hay "incubadoras de repuesto", por lo que los dos aparatos que sufrieron las averías fueron sustituidos y su reparación ni siquiera era una cuestión de "urgencia". En ese sentido, quiso aclarar que "ningún niño tuvo que ir a ningún otro lugar" y todo funciona "con normalidad" en esa unidad del hospital.
