La Audiencia Provincial de Lugo impuso una condena de dos años de prisión a P.M.G., un hombre de 38 años de edad, natural de Colombia, que fue sorprendido vendiendo cocaína e intentó llegar a un pacto con la Policía.
Tal y como explicó un agente durante la vista oral -celebrada el pasado 15 de noviembre- el hombre fue arrestado por tráfico de estupefacientes y de forma inmediata se ofreció a delatar a su suministrador si el chivatazo le reportaba algún beneficio. «Me dijo que si le ofrecía un trato me contaba de dónde había sacado la droga, pero que si no era así, no le compensaba», declaró el policía.
El detenido no logró su propósito y acabó sentado en el banquillo de los acusados de la Audiencia, que finamente lo declaró culpable de un delito contra la salud pública.
