Con los codos hincados en el aire

Fiz López.
photo_camera Fiz López.

«Estamos preocupados porque no sacan plazas, no convocan oposiciones y por encima cada media hora cambian los temas». El desánimo lo expresa Alba García, estudiante de último curso de Magisterio en Lugo. A punto de terminar sus estudios, observa con desazón el futuro. No es la única. Tiene amigas que ya han empezado a preparar las oposiciones y que se han quedado con un palmo de narices con el cambio de temario que esta semana aprobó el Ministerio de Educación. «Llevaban meses estudiándolo y yendo a clases para nada», dice.

El panorama no le aporta ninguna seguridad y a su compañera de curso, Belén Núñez, tampoco. «Yo ya estoy desanimada, porque veo que voy a acabar y no voy a saber qué hacer, porque a ellos los veo así», dice refiriéndose también a sus amigos opositores.

El anuncio del ministro de Educación de anular los temarios que aprobó el gobierno socialista pocos días antes de las elecciones para volver a los del año 93, al tiempo que anunciaba un futuro sistema de acceso, pero sin especificar cuál, ha dejado en el limbo a quienes quieren entrar en la docencia o a quienes preparan opositores.

«Llevábamos meses haciendo los temas con mucho trabajo para poder darlos a tiempo y ahora queda todo anulado. Ahora preguntaremos a los alumnos qué quieren hacer. Les decimos que se centren en la parte práctica, porque siempre les va a servir para algo», dice una preparadora. Pero los temarios ya es otra cosa, porque este año no habrá oposiciones en la mayoría de las comunidades y para el año que viene quizás vuelvan a cambiar.

Esta incertidumbre ha llevado a muchos alumnos a dejar las academias, y algunas han empezado ya a cerrar grupos. «Desde que cambiaron os temarios, chamaron a tres e catro diarios para darse de baixa», aseguran en la Academia Nos. Otras, sin embargo, este año ya ni siquiera los han iniciado porque no lo veían claro.

Sistema

Para Julio Díaz, presidente del sindicato de enseñanza Anpe en Galicia, es necesario definir un sistema «claro y perdurable, que valore la capacidad y el mérito y que ponga a los mejores en los centros», pero pide que «lo que vayan a decidir, lo decidan ya» para no prolongar la incertidumbre. Señala lo ilógico de retomar unos temarios que «incluyen temas de la Logse», una ley que se ha derogado, y denuncia que «mucha gente se había gastado mucho dinero en los nuevos y en las clases de estos meses», apunta.

Quienes preparan Primaria, asegura Julio Díaz, este año solo tendrían oportunidad en Canarias, si es que esta comunidad no se vuelve atrás, y quizás en Madrid, que aún no tiene oferta. Los de Secundaria podrían contar además con Andalucía, País Vasco, y Cantabria, pero algunas se plantean recurrir el cambio de temarios, para mayor incertidumbre.

Tampoco se sabe con certeza qué sistema de acceso vendrá después. Se habla, dice Díaz, de que será similar al Mir de los médicos, que consiste en un examen sobre los contenidos de la carrera, cuya nota cuenta en un tanto por ciento y el resto lo aporta la media de expediente. Quienes pasan el corte inician cuatro años de formación pagada como residente y, a su término, deben opositar para lograr un plaza en la sanidad pública.

El sistema sería una novedad. Hace décadas, además de las oposiciones, se podía acceder de modo directo con un expediente brillante. Con el sistema transitorio de los últimos cinco años, sin embargo era prácticamente imposible lograr plaza si no se tenía experiencia docente reconocida.

Alba no sabe qué sistema sería el ideal y Belén prefiere «una oposición justa». Por su parte, Fiz López, apuesta por que la práctica decida. «Un neno non é un bloc sobre o que escribir e non vale de nada que ti saibas un montón de leis, se non eres capaz de transmitir coñecementos». Cree que estaría bien eliminar la posibilidad de «enchufes» y que «se avalíe polo traballo cos alumnos». El tiempo y el ministerio dirán.

Resultados

  • ¿Por qué España queda mal en el informe Pisa?

Una de las razones que esgrime el ministro de Educación para defender el cambio de sistema es el mal resultado que los alumnos españoles obtienen en los informes Pisa. ¿A qué se debe? Para el director de la Facultad de Formación do Profesorado de Lugo, Francisco Lestegás, la razón estriba en que «os exames do informe Pisa buscan que os alumnos apliquen os contidos a situacións da vida diaria porque esa é a maneira de aprender dos países escandinavos. Eles quizá teñen menos coñecementos ca os nosos estudantes, pero aplícanos mellor. Aquí temos un sistema moito máis academicista, estudan as cousas, pero non lles atopan aplicación».

  • Propuesta

Julio Díaz está convencido de que «cuando separen la política de la educación, va a funcionar».

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