¡A comprar a la calle!

Uno de los puestos en la Rúa Progreso. (Foto: J. Vázquez)
photo_camera Uno de los puestos en la Rúa Progreso. (Foto: J. Vázquez)

Las primeras lluvias de septiembre ralentizaron el arranque de la tercera edición del Street Market que organiza la Asociación de Autónomas de Lugo, pero a partir de media mañana los puestos callejeros que instalaron más de setenta comercios en las calles del centro empezaron a registrar actividad, que ya no decayó hasta bien pasada la hora de cierre. Artículos de textil, calzado, artesanía, lencería, ropa de hogar, joyería, artículos de regalo, perfumería, ópticas o librerías con descuentos variables salieron al encuentro de viandantes en busca de gangas.

La presidenta de la asociación, Nora Real, hizo una valoración muy positiva de la jornada, si bien reconoció que los chubascos de primera hora hicieron mella en la asistencia. Pero, en general, la iniciativa fue un éxito. «Tanto el comprador como el vendedor quedaron satisfechos», apuntó. La iniciativa cuenta con el apoyo de la Diputación Provincial y el Concello de Lugo.

Los puestos, identificados con manteles de color naranja, se distribuían principalmente por las calles circundantes de la Praza Maior, así como Armanyá y Rúa Nova. En esta vía participaron un alto número de comercios.

La mayor parte del género que sacaron a la calle correspondía a artículos de verano, pero algunos comerciantes aprovecharon para impulsar las ventas de la nueva temporada y aplicaron descuentos de hasta un 20% a los productos recién llegados a las tiendas.

Los restos de temporada ofrecían rebajas del 60 y el 70% y en algunos casos incluso más. En algunos puestos, los artículos se clasificaron en distintas categorías de precios. Sin embargo, a diferencia de las rebajas oficiales, algunos comerciantes dejaron claro en carteles que no se aceptaban devoluciones.

Para atraer la atención de los viandantes y contribuir a la animación de calle, algunos establecimientos recurrieron a la música o a la ayuda de modelos que expusieran sus productos. Además, la mayoría retrasó el horario de cierre porque las compras se extendieron hasta la noche.

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