Cientos de vecinos reclaman que el Sagrado Corazón conserve sus curas

Feligreses concentrados a la puerta de la iglesia (Foto: Xesús Ponte)
photo_camera Feligreses concentrados a la puerta de la iglesia (Foto: Xesús Ponte)

Varios cientos de vecinos salieron ayer a la calle en el Sagrado Corazón para reclamar al Obispado la permanencia en el barrio de los sacerdotes Guillermo Méndez y Miguel Fernández.

Mientras se extendían los rumores de que a Miguel Fernández se le ha comunicado ya su traslado a las parroquias de Benade y Muxa (algo no confirmado oficialmente), los vecinos recogían firmas para demandar su continuidad en el barrio y su nombramiento como párroco.

Tras una concurrida misa en la que no hubo referencias al traslado, pero en la que flotaba el malestar, los feligreses empezaron exhibir folios con consignas y, ya en la calle, desplegaron una gran pancarta con el lema ‘Don Guillermo y Don Miguel, sí. No a kikos e roucos’. Esa fue también la consigna más repetida durante la manifestación, que partió de la explanada de la iglesia, siguió por la calle Carlos Azcárraga y continuó por las calles del polígono.

Jóvenes y mayores se dieron cita en la marcha, que tuvo uno de sus momentos más emotivos ante la vivienda de Guillermo Méndez, sacerdote que a sus 96 años sigue como párroco y que lleva en el barrio cincuenta años, desde que se creó la parroquia. El veterano cura no estuvo ayer en la misa tras la que se celebró la manifestación, pero los vecinos quisieron hacerle un reconocimiento con ese gesto de pararse ante sus ventanas. La eucaristía fue oficiada por Miguel Fernández, que se despidió de los feligreses deseando un buen domingo y no hizo ninguna referencia al conflicto.

No obstante, nada más acabar la ceremonia se alzaron las primeras palabras para llamar a los vecinos a pelear por la continuidad de ambos sacerdotes en el barrio, frente al plan del obispado, que prevé crear en la parroquia la primera unidad pastoral de la capital.

Esa unidad pastoral sería coordinada por un cura de origen brasileño trasladado desde Madrid y aglutinaría a las parroquias del Sagrado Corazón, As Gándaras, Castelo, Muxa y Benade.

Frente a esa reorganización, los vecinos reivindicaron la continuidad del actual equipo y corearon y exhibieron consignas como ‘Experimentos kikos en Lugo no’ o ‘Mentiras no’. También exhibieron lemas acusando al obispado de ‘mala fe’ y aseguraron que continuarán movilizándose contra el traslado de Miguel Fernández.

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