Basta mencionar el nombre de Manuel Sánchez Salorio para empezar a escuchar mensajes de admiración hacia un hombre que ha marcado la historia de la oftalmología. Pese a su prestigio, Salorio ejerce de hombre modesto y próximo, que recuerda con humor y afecto su experiencia como oftalmólogo en Lugo, donde llegó a trabajar tras aprobar su primera oposición. Hoy estará en el Hula para dar una conferencia magistral sobre ‘Cambios en la función social del médico’.
Advierte que no llega a Lugo con ánimo de hacer de «gurú». «No soy ningún futurólogo», dice con sorna cuando habla del título de su charla, pero enseguida se nota que la medicina es su pasión y que ha estudiado y pensado mucho sobre el papel jugado por los médicos a lo largo de la historia.
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