Bases para el futuro

Rúa Ángelo Colocci, en A Piringalla (Fotos: XESÚS PONTE + SEBAS SENANDE + EPL)

A PIRINGALLA es uno de los barrios más atractivos de Lugo por su tranquilidad. Aglutina a vecinos de edad avanzada y jóvenes que aportan a partes iguales experiencia y frescura, ayudando así y en colaboración con las asociaciones vecinales a dinamizar la vida social de una zona estratégicamente situada, que no ha parado de crecer y extenderse desde que comenzó su gestación hacia el año 1947.

Los colectivos más representativos del barrio son la Asociación de Vecinos de A Piringalla y la Asociación San Isidro, presididas por Manuel Pardo y Ricardo Varela, respectivamente, quienes coinciden en la necesidad de que se habilite «el canil prometido hace años» por la concejalía de Medio Ambiente, para solucionar los problemas de higiene que supone la actitud de quienes no recogen los excrementos de sus mascotas,

«Queremonos levar ben con todos os veciños, e os cans tamén o son», comenta Ricardo Varela, para quien el verdadero problema -que hacen extensivo a toda la ciudad- no radica tanto en que aproximadamente «o 50 por cento dos propietarios» no recojan los excrementos por el día, sino en que, insiste, «é polas noites, cando non os ve ninguén, cando a práctica totalidade dos donos non limpan o que os cans ensucian».

Varela critica en este aspecto que tanto al bajar de casa por las mañanas como al abrir el comercio «temos que andar a limpar con caldeiros de auga e fregonas a entrada. E incluso déixanos mexar nos motores dos coches».

Con todo, y a pesar de faltas de civismo puntuales, la valoración global del barrio por parte de los vecinos es «muy positiva», si bien quedan «flecos pendientes» por solucionar como el vallado de algunos solares en Angelo Collocci, Buxo y Rúa das Fontes, o el arreglo de la salida a la N-VI por Mar Cantábrico, «que está totalmente destrozada desde los depósitos nuevos a la salida de la circunvalación», añade Pardo.

Otra de las demandas vecinales se refiere al acondicionamiento del jardín existente en Angelo Colloci pues «cada vez que llueve la arenilla que se echó en el suelo sale para la acera y se atascan los sumideros», indica Pardo. Además, entre las calles Manuel María y Buxo existe un solar que necesita con urgencia «una limpieza», explica. También se producen quejas en relación a la deficiente limpieza del suelo en donde se ubican los contenedores de recogida de basura.

A la espera de saber cuándo comenzará a funcionar la biblioteca, qué se va a hacer con los restos arqueológicos y cómo se solucionará la escasez de plazas en la guardería, el barrio mantiene su jovialidad en torno a los dos institutos, el colegio, las instalaciones deportivas y el centro sociocultural María Balteira, e incluso cada vez son más los jóvenes emprendedores que abren algún negocio.

FIESTAS. Un referente en la Zona Norte

La Asociación San Isidro es la encargada de celebrar las fiestas del barrio -que este año serán del 15 al 19 de mayo- con una carrera solidaria y una concentración motorista que cuenta con pilotos llegados de toda España y una exposición de motos. Además, durante el San Xoán se celebra una degustación de ternera cocinada en hornos de leña de la zona -que incluye cerveza, pan, agua y vino gratuitos-, y en noviembre los vecinos celebran un magosto. Aparcamiento Los colectivos vecinales de A Piringalla destacan la amplitud de las calles y la posibilidad de aparcar sin apenas problemas, además de existir un párking.

DEMANDAS
Tráfico «Hay que mejorar la señalización» Los vecinos demandan mejoras de señalización, entre otras calles, en los cruces de la Rúa Lavandeira y Angelo Colloci, con la finalidad de evitar posibles accidentes.		Dotaciones «La biblioteca sería beneficiosa» El parón en el que desde hace meses se encuentra la obra de la biblioteca no desanima a los vecinos, que demandan una solución para una dotación que consideran «imprescindible».
Aceras «Hay pavimentaciones deficientes» El arreglo de las calles donde el firme presenta baches u otras deficiencias es una de las demandas más reiteradas por los vecinos, así como la saturación de los sumideros.		Canil «Se prometió hace varios años» Una de las demandas en las que más se insiste es en la creación del canil prometido hace años y que no se ha materializado, pese a los problemas de higiene que su carencia conlleva.