El empleado del centro de día Antonio Gandoy que el pasado lunes se disparó por accidente en una pierna dentro de las dependencias municipales y en horario de trabajo fue apartado cautelarmente del servicio. El alcalde accidental, Luis Álvarez, confirmó ayer que la empresa Alalás, concesionaria del centro, tomó esa medida una vez tuvo conocimiento del suceso.
El hombre, J.M.V.B., de 35 años e hijo de una concejala del equipo de gobierno, no tenía licencia para usar armas de fuego. Según pudo saber este diario, la pistola que utilizó era, en realidad, detonadora y estaba diseñada con propósitos exclusivamente intimidatorios. Sin embargo, había sido manipulada para que pudiera disparar balas. Esa clase de armas, aún conservando su estado original, solo pueden ser usadas si se cuenta con permiso.