Adelgazar para siempre. La dieta paleolítica

Excluye aquellos alimentos que se introdujeron en nuestra dieta tras el desarrollo en el pasado de la agricultura y la ganadería y, más recientemente, de la industrialización

MARÍA CALLAS llegó acompañada a la clínica a primera hora de la mañana. Allí le esperaban veinte huevos de tenia para ser ingeridos y conseguir finalmente la delgadez añorada. Una vez en casa, ya de tener que tomar aquel monstruo, como lo llamaba, pensó en al menos ahogarlo en el champán... y acto seguido ingirió los 20 huevos del parásito uno detrás de otro, olvidando la recomendación de la prescripción de Hassler de tomarlos con agua y de los fuertes dolores y calambres de estómago que tendría...».

Este episodio, junto con muchos otros, nos pone de manifiesto lo que en ocasiones estamos dispuestos a hacer por mantenernos delgados.

La primera de las dietas se atribuye a William Banting, un inglés que en 1863 popularizó el hecho de ponerse a dieta con su método Banting, el cual descartaba el pan, la mantequilla, la leche, el azúcar, la cerveza y las patatas. Las catalogadas como dietas ricas en proteínas y/o pobres en hidratos de carbono (dieta Atkins, método Dukan, sistema Pronokal, etc.), surgen de esta dieta.

La dieta del hombre de las cavernas o dieta paleo se nutre principalmente de carne, pescado, verdura, frutos secos y raíces, excluyendo cualquier tipo de alimento preparado, o transformado, así como productos lácteos, legumbres, sales y azúcares y aceites procesados, minimiza el consumo de carbohidratos y aumenta el de grasas naturales.

Hace ya más de 25 años que nació en Estados Unidos una forma de alimentarse basada en lo que teóricamente comían nuestros antepasados en la era Paleolítica, cuando el hombre era cazador y recolector, antes de que se desarrollaran la ganadería y la agricultura. La primer información se encuentra en el New England Journal of Medicine Paleolithic Nutrition, un artículo realizado por el radiólogo Boyd Eaton.

¿En qué consiste la Paleodieta?

La paleodieta excluye aquellos alimentos que se introdujeron en nuestra dieta tras el desarrollo en el pasado de la agricultura y la ganadería y, más recientemente, de la industrialización, como son los cereales, las legumbres, los productos lácteos, la sal, el alcohol, las carnes grasas, el azúcar refinado y los productos procesados industrialmente.

Si bien no podemos imitar exactamente la dieta de nuestros antepasados del paleolítico porque significaría prohibir un gran número de alimentos habituales en la actualidad y necesitaríamos también reproducir su nivel de actividad física, algo muy difícil de lograr, sí podemos adaptar la dieta paleo a la realidad que vivimos hoy en día.

Para ello, damos algunos consejos que le permitirán adelgazar usando la dieta paleo adaptada a la actualidad:

- Ingerir a diario carnes magras o con muy escaso contenido graso, usando para ello métodos de cocción sanos (plancha, horno, asado).

- Consumir diariamente frutas y verduras crudas, para incrementar el aporte de fibra y de hidratos complejos.

- Evitar los alimentos procesados, es decir, precocidos, snacks comerciales, galletas, fiambres, embutidos, bollería o refrescos.

- Limitar al máximo o no consumir cereales de ningún tipo.

- Consumir legumbres en lugar de arroz, fideos y otros cereales.

La dieta paleolítica no solamente puede ayudarle a perder peso, y conseguir ese cuerpo fabuloso que desea, sino también puede contribuir a reducir el riesgo de diversas enfermedades entre ellas la enfermedad cardiovascular, reducir la presión arterial, mejorar el síndrome metabólico, diabetes tipo 2, y existen estudios iniciales donde se intuye que podría estar relacionada con la mejoría del alzhéimer y algún otro tipo de demencia.

Por otro lado las comidas ricas en proteínas y grasas sacian nuestro apetito, no sentimos esa sensación de hambre constante y esto contribuye a estabilizar nuestros niveles de azúcar en sangre y mejorar nuestro humor.

La mayoría de las personas que adoptan esta dieta adelgazan y aumentan su masa muscular. Esto se debe a que la dieta paleolítica, complementada con actividad física, acelera el metabolismo y quema los depósitos de grasa.

No debemos descartar el pasado sin un análisis exhaustivo. El pasado de nuestros ancestros puede que esconda mucha sabiduría.

Si va a iniciar alguna dieta, no olvide consultar a su médico si usted puede ser candidato idóneo para ser incluido en la dieta paleolitica.

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