Tamara Falcó se encuentra "al límite". El estrés por los últimos preparativos de su boda con Íñigo Onieva y la "presión mediática" están afectando a la celebrity.
Esta semana la aristócrata respondió tajante a varios reporteros que le preguntaron sobre su supuesta intención de bajar peso de cara a la boda. "El vestido me lo hacen a medida y, por lo tanto, está hecho a mi cuerpo. Menuda tontería y falta de respeto. Yo estoy en mi normopeso", apuntó, indignada, la la hija de Isabel Preysler.
Este jueves, preguntada por si sentía presión mediática, Falcó respondió entre risas: "¿Vosotros que creéis?".
Según apuntó una persona de su círculo próximo a la revista Semana, la celebrity está sometida a mucho estrés y "en cualquier momento petará".