Cayetano Martínez de Irujo ha confesado en el programa Lazos de Sangre, de Televisión Española, que sus años en la casa de Alba no han sido nada fáciles. "No te dejaban opinar. No te dejaban decir. Cuando yo me empecé a revelar me pegaban. A mis hijos les estoy dando todo lo contrario", aclaraba en un momento de la entrevista.
Cuando se hizo referencia a sus supuestos actos de rebeldía, añadía "como para no rebelarme. Teníamos 14 años y la nany no nos dejaba escoger la ropa".
Cuando se murió mi padre fue un vacío tremendo. No se nos dejó despedirnos de él
Pero sin lugar a dudas, uno de los momentos más impactantes de las declaraciones de Cayetano ha sido el momento en el que ha dado a conocer los problemas que le trajo no poder despedirse de su padre, algo que recuerda como uno de los grandes traumas de su vida.
"Cuando se murió mi padre fue un vacío tremendo. No se nos dejó despedirnos de él. Fue horrible. Me causa un dolor… Cómo nos engañaron. Estuve rezando con mi hermano Fernando durante 10 días para que se curara nuestro padre. Tristemente se había muerto ya sin que los supiéramos", explicaba entre lágrimas.
"He tenido que hacer muchas terapias de muchos tipos porque yo pensaba que mi padre me había abandonado… Me cuesta hablarlo. No me sentía feliz. Mi madre me pidió perdón por no habernos dejado despedir de él. Eso fue un error gravísimo…", concluía.
