Defitivamente está siendo un mal mes para Carolina Molas, madre de Íñigo y Alejandra Onieva. Si recientemente la veíamos completamente superada y llorosa debido a la montería mediática que se le ha instalado en el jardín de casa en busca de su hijo, el exprometido de Tamara Falcó y actual presa de caza de todo paparazzi patrio, la empresaria se enfrenta ahora a un nuevo reto: sobrevivir a los rumores de noviazgo de su hija, la actriz Alejandra Onieva, con Iker Casillas.
Y es que es bastante previsible que la presencia de flashes en la casa de los Onieva vaya a más los próximos días tras revelar Socialité que exguardameta e intérprete llevan un tiempo viéndose a escondidas. "Iker lleva varias semanas quedando con la hermana de Iñigo y parece que está bastante ilusionado", sostiene una presunta fuente cercana al exmerengue. "Hablan a diario y tienen citas pero no le han puesto etiquetas a lo suyo", añaden desde el espacio de Telecinco.
El caso es que si observamos las redes sociales de ambos, hace semanas que intercambian mensajes y emojis cariñosos, aunque estos mensajes también sería muy normales entre dos amigos. Habrá que esperar a ver si hay confirmación y desearle fuerza y paciencia a Carolina Molas, que seguro que sufrirá una semana más el peso de las cámaras sobre su día a día y que tenía razón a principios de semana cuando dijo que ella se merece que la dejen tranquila y le permitan vivir.