Una antigua amiga de Longueira asegura que ésta le confesó ''tener miedo de ir a la cárcel'' tras el crimen

Marta Sánchez, una antigua de Mar Longueira, la madre de los dos mellizos de diez años a los que su pareja de aquel momento, Javier Estrada confesó haber matado en agosto de 2011 en su domicilio del barrio coruñés de Monte Alto, ha afirmado que Mar tenía "miedo de que la metiesen en la cárcel".

En la última sesión del juicio, que se celebra en la Audiencia Provincial de A Coruña, Sánchez ha declarado que su entonces amiga le había comentado, tras la muerte de los menores, que si ella los hubiese escuchado "estarían vivos y no muertos" porque ellos le relataban que "estaban siendo maltratados" por Javier.

"Me veo presa, me veo presa", ha contado Sánchez que le decía Longueira. Después de que los menores fueran golpeados hasta perder la vida.

En la jornada de esta mañana también ha prestado declaración la madre de una de las cuidadoras de los niños, que ha contado que su hija le comentó que Javier Estrada pegaba a los niños y que ha recibido la llamada tanto de Mar como de un abogado para que testificara a favor de Longueira para que dijese que les "trataba bien".

Otra llamada a declarar ha sido una antigua vecina de Mar Longueira, de cuando vivía con su madre, en Pérez Quevedo, que ha afirmado que oía llorar a los niños todos los días y que vio como Mar les pegaba en dos ocasiones. Así, ha relatado dos episodios, el de un bofetón y un empujón por las escaleras.

Tras culminar su testimonio, al abandonar la sala, esta vecina se dirigió a Mar Longueira, sentada en el banquillo al estar acusada de maltrato, y le dijo con tono irónico: "suerte guapa", a lo que Mar replicó: "la tuya hija..."

La fiscal ha retirado para Mar Longueira un delito de malos tratos y ha añadido dos de homicidio imprudente. Para Javier Estrada, la pena que se solicita es de 50 años al entender que es autor de dos delitos de asesinato, ocho de lesiones y dos de malos tratos habituales.

Comentarios