Las labores para reflotar el volantero 'Hermanos Landrove', que naufragó este martes a 20 millas al noroeste de la localidad coruñesa de Cedeira, ''se iniciarán el viernes'', según confirmó la aseguradora del buque, Seguros Mutuos Marítimos de Vigo. De esta manera, se espera que si las condiciones meteorológicas lo permiten, el barco podrá estar nuevamente a flote entre el viernes y el sábado, con el fin de iniciar las investigaciones para determinar las causas del hundimiento.
Según explicaron fuentes de la empresa viguesa, tras la muerte del armador del barco en el siniestro, Seguros Mutuos se encarga ahora de contatar a los buceadores. Paralelamente, una empresa de salvamento se encarga de elaborar el plan de reflotamiento del barco de Cariño, de 17,7 metros de eslora, que se fue a pique en extrañas circunstancias en la madrugada del lunes al martes.
Se prevé que en la operación tendrá que participar una grúa de la dársena de Caneliñas, que se encargará de levantar el pesquero, una vez que los buzos procedan a sujetar los enganches a la embarcación.
Por lo que respecta a las causas, la aseguradora indicó que ''no se sabrá nada'' hasta que el barco haya sido reflotado. ''Al levantarlo, podremos comprobar si se hundió por una vía de agua en caso de que chorree'', explicaron.
Declaración de los supervivientes
Desde su llegada al puerto de Ferrol sobre la 1.00 de la madrugada de este miércoles, adonde fue remolcado por el buque de Salvamento Guardamar Concepción Arenal y por el Sebastián Ocampo de la Xunta, la embarcación permanece atracada en la dársena con la quilla al sol. La operación se efectuó con todas las precauciones, remolcando el barco ''fuera de las rutas de mayor tráfico marítimo para evitar que el pecio pudiera irse al fondo del mar''.
En este contexto, las investigaciones que se llevarán a acabo en las próximas horas serán determinantes para dilucidar las causas del suceso, aunque algunas voces apuntan a un movimiento de la carga o a que este modelo de barco puede presentar algún defecto estructural que aumenta su inestabilidad.
También lo será la declaración de los siete tripulantes que lograron salir con vida del naufragio en el que pereció el patrón accidental del buque, de 47 años, al quedar atrapado entre el aparejo. Según informaron desde la Capitanía Marítima, estos tendrán que declarar este jueves en Ferrol ante los miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciami), dependiente de Fomento. Los miembros del ente --que llegarán este jueves procedentes de Madrid-- empezarán a escuchar las versiones de los náufragos a partir de las 10.00.
De luto en Cariño
Entretanto, en Cariño las banderas ondean a media asta, en señal de duelo por la muerte del patrón del barco. De hecho, el Concello decretó el luto oficial ''para transmitir nuestra solidaridad a la familia'', explicó el alcalde José Luis Armada.
Unas 600 personas acudieron al sepelio, que se produjo este miércoles por la tarde en la iglesia parroquial de Santa María da Pedra.
Después de que este martes el Grupo de Expertos No Gubernamentales del Sistema Mundial de Socorro reclamase una investigación sobre la pericia en materia de riesgos laborales y seguridad en el mar de la tripulación, el alcalde de Cariño, José Luis Armada, defendió este miércoles la ''profesionalidad'' de los ocho trabajadores del 'Hermanos Landrove'. ''Tanto el patrón como los tripulantes son buenos profesionales, pero el mar es duro, es un medio hostil'', recalcó.
