Un directivo de PSA ve prematuro avanzar las consecuencias de la posible compra de Opel

Gilles Le Borgne asegura que la alianza con General Motors se traduce en la fabricación de una versión de las furgonetas K9 para Opel
Vista de la cadena de montaje de la PSA Vigo
photo_camera Vista de la cadena de montaje de la PSA Vigo

El director de Calidad e Ingeniería y miembro del Comité Ejecutivo del Grupo PSA, Gilles Le Borgne, cree prematuro predecir las consecuencias en materia laboral de una eventual compra de Opel por parte del grupo francés.

Le Borgne ha señalado sobre el caso concreto de la fábrica de PSA en Vigo, que este miércoles ha visitado al igual que las instalaciones del Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia (CTAG), que la alianza con General Motors se traduce en la fabricación de una versión de las furgonetas K9 para Opel.

De esa "estrecha colaboración" con General Motors, que se remonta a 2012, han surgido otros dos proyectos en desarrollo, ha abundado Le Borgne, quien a la pregunta de cómo podría afectar la compra de Opel por PSA a las fábricas de ambas marcas en España ha evitado hacer más comentarios.

El Grupo PSA tiene dos fábricas en España (Vigo y Madrid) y una en Portugal (Mangualde) en la que trabajan 8.100 personas, mientras que General Motors (GM) -al que pertenece la marca Opel- posee otra factoría en Figueruelas (Zaragoza) de 5.500 trabajadores, por lo que juntos suman 13.600 empleados.

Las tres plantas que constituyen el Polo Industrial Ibérico del Grupo PSA produjeron 555.000 vehículos en 2016 y 27.000 colecciones CKD (subconjuntos de piezas y carrocerías ensambladas para la exportación).

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