Técnicos de la comisión de accidentes marítimos de Fomento investigan los naufragios

Todos los tripulantes de los dos barcos estaban dados de alta en la Seguridad Social y sus empresas tenían al corriente los pagos 

Una lancha auxiliar del buque de Salvamento Marítimo Don Inda, pasa junto a un barco pesquero durante la búsqueda del marinero desaparecido del Sin Querer Dos. LAVANDEIRA JR (EFE)
photo_camera Una lancha auxiliar del buque de Salvamento Marítimo Don Inda, pasa junto a un barco pesquero durante la búsqueda del marinero desaparecido del Sin Querer Dos. LAVANDEIRA JR (EFE)

Técnicos de la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim) indagan en Galicia sobre las causas de los dos naufragios ocurridos en Fisterra y Malpica el miércoles y el jueves que han dejado cuatro fallecidos, un desaparecido y nueve personas rescatadas. 

De ello informan por parte del Ministerio de Fomento a Europa Press, que explican que "se ha abierto la investigación técnica en ambos casos", en unas pesquisas que comenzaron el miércoles en el caso del Sin Querer Dos y este jueves en el de Silvosa. 

Los resultados de la investigación de la Ciaim se plasmarán en un informe que contempla la información sobre los hechos en relación con el accidente, con un análisis del mismo, unas conclusiones y unas recomendaciones en materia de seguridad. 

Estas recomendaciones constituyen el medio que se considera más adecuado para proponer medidas que permitan aumentar la seguridad marítima para el futuro. Así, la investigación es de carácter exclusivamente técnico, por lo que no está dirigida a determinar culpas ni responsabilidades de ningún tipo. 

Los supervivientes del Sin Querer Dos (en Fisterra) apuntan a un golpe de mar como causa del naufragio, el cual provocó que las redes se enrollasen en las hélices, lo que dio lugar a un parón de la máquina y el vuelco. En el caso del 'Silvosa' (en Malpica) la tripulación achaca el hundimiento a las corrientes que hicieron que la embarcación tocase el muro de defensa del puerto y ocasionó su volteo. 

El buque de artes menores Silvosa, hundido en Malpica, entró en servicio en 1993. El material de su casco es de madera, tiene una eslora de más de 12 metros y una potencia de 50 caballos. 

Por su parte, el cerquero Sin Querer Dos, naufragado en Fisterra, entró en servicio en 1996, si bien destaca por sus buenas condiciones técnicas. El material de su casco es de acero, tiene una eslora de más de 26 metros y cuenta con una potencia de 270 caballos.

TRIPULANTES DADOS DE ALTA. Por su parte, todos los tripulantes de los dos barcos naufragados estaban dados de alta en el régimen especial del mar de la Seguridad Social. 

Según fuentes de la Seguridad Social consultadas por Europa Press, las empresas tenían al corriente a todos los trabajadores en pagos y cuotas del Instituto Social de la Marina. 
 

Comentarios