Roberto García ha sido reelegido secretario general de Unións Agrarias (UU AA) encabezando una ejecutiva que se reduce de 19 a 7 miembros y que recibió el 93,28 por ciento de los votos en el IX Congreso de la organización, clausurado hoy en Santiago de Compostela.
A la clausura asistió el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, junto con la conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, así como el secretario general de UGT, Cándido Méndez; el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, y representaciones políticas, como el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, o la portavoz de AGE Yolanda Díaz.
El resto de la ejecutiva estará integrado por José Rodríguez Blanco, como secretario de organización; Javier López Iglesias, de Asuntos económicos; Verónica Marcos Arrojo, de Igualdad; Begoña Liñares García, de juventud; y como secretarios de la propia ejecutiva, Rosario Muñiz López y José Castro Carballeiro.
En declaraciones a los informadores, García dijo que se trata de un congreso "histórico", en la medida en que supone "convertir un sindicato agrario en una organización del rural, con una presencia masiva en sectores desfavorecidos dentro de ese rural".
Para García, la preocupación no es solo por el precio a cobrar por los productos, sino "la defensa de derechos que creíamos básicos y que en el rural se están, por razones meramente economicistas, cuestionando". En este sentido, dijo que los "derechos" a la educación o a la sanidad se van "desplazando" en un rural cada vez más despoblado y envejecido y donde cada día se habla más de "servicios". En su opinión, esta situación "choca poderosamente" con la pretensión del Gobierno de rejuvenecer e incorporar activos al rural.
El sindicalista explicó que otro aspecto importante de este congreso es la decisión de "profesionalizar los distintos sectores, convirtiéndose en organizaciones de productores, no solo en la leche, que está regulada por la UE, sino en el resto de sectores básicos, la huerta, el vino, o la patata". Así, explicó que "la organización agraria debe cumplir con la función básica de reclamar de las autoridades medidas concretas, pero también involucrarse en ayudar a comercializar los productos que tienen".
Para ello, avanzó la "lucha sin cuartel contra la gran distribución", que utiliza los productos agrarios como elementos para ganar clientes, con ventas a pérdidas, "utilizando productos gancho, por lo tanto productos engaño y logrando que en la mayor parte de los casos al agricultor y ganadero se les pague por debajo de lo que les cuesta producir".
Finalmente, consideró que si se desarrollan estas ideas básicas, Galicia estará en condiciones de liderar el sector lácteo español, con 10.000 explotaciones y más de 50.000 empleos indirectos, con repercusión también en el pequeño comercio de las zonas lecheras.
Por su parte, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, subrayó en declaraciones a los informadores que "Galicia es rural", a pesar de que la mayoría de la población viva en villas y ciudades. En su opinión, "Galicia no sería Galicia sin un sector primario fuerte y Galicia cometería un error si descuida su despensa, si descuida la leche, la pesca, el marisqueo o la carne".
Tras subrayar que su Gobierno sigue "apostando sin duda por el rural", recordó que existe "un bloque legislativo" que va desde los aprovechamientos forestales, la ordenación de los montes, la mejora de la reforma y estructura agraria o un régimen fiscal específico para el sector rural.
Sobre este último aspecto, resaltó que "no hay ninguna actividad económica en Galicia que tenga un régimen fiscal tan favorable como el sector rural, que es -explicó- impuestos cero para aquellos que compren o donen o testen una tierra, siempre y cuando el adquiriente la siga dedicando a cuestiones primarias, al cultivo de esa tierra o al aprovechamiento forestal".
Reconoció que existen "retos", como la liberación de la cuota láctea, pero recordó que "hoy Galicia produce un 23 por ciento más de leche que lo que producía hace 10 años" y apostó por "una organización de productores cuanto más unida mejor y una industria que tenga en muy claro que, por ejemplo, la producción de leche en polvo es una solución ante el incremento de la producción láctea".
También se dirigió a los distribuidores, "que tienen que saber -dijo- que es un error poner la leche como producto reclamo en sus góndolas en las cabeceras de las grandes superficies".
Roberto García, reelegido secretario general de Unións Agrarias
