"Tengo temor a la fusión si va a ser gestionada por Feijóo". Son las palabras de Anxo Quintana, vicepresidente del Gobierno gallego y portavoz nacional del BNG durante seis años (2003-2006), quien también se ha sumado al balance del año que se cumple de su derrota en las elecciones que le devolvieron la Xunta al PPdeG.
Con su partido a favor de la unión de Caixa Galicia y Caixanova, el político alaricano dejó claro que "el nacionalismo financiero repentino" manifestado por el titular de la Xunta no lo tranquiliza: "Creo que nos quiere dar gato por liebre". Quintana calificó de "buena y necesaria" la Lei de Caixas, que los nacionalistas votaron a favor en el Parlamento, al igual que el PPdeG, y manifestó su convicción de que es "tan constitucional como el Estatuto catalán".
En este sentido, criticó la doble vara de medir de los populares respecto a la norma gallega y el texto catalán, y defendió así mismo el informe del Instituto Galego de Estudos Europeos e Autonómicos (IGEA) que él preside, y que generó polémica al cuestionar la fusión de las cajas: "Era un documento técnico que no buscaba la controversia política", dijo, para atajar a continuación que "lo auténticamente importante es qeu Galicia tenga un sistema financiero propio y fuerte, que es lo que el PP no defiende".
"Y ahora que el señor Feijóo declara la independencia financiera de Galicia, considera que Galicia no tiene que escuchar absolutamente ninguna indicación del Banco de España y declara que las cajas son del pueblo" --ironizó Anxo Quintana--. "Lo único que le queda es reconocer, institucionalmente, el carácter nacional de Galicia".
Mirada al futuro
"En vez de eso, lo que pretende es que Galicia tenga un estatuto de segunda y llorar", reflexionó sobre la "falta de estrategia" del presidente de la Xunta y su equipo para conseguir más de competencias.Al respecto, afirmó que lograr que Galicia consiga aumentar sus niveles competenciales depende de la "voluntad" de la Xunta para llevarlo a cabo, porque "Madrid nunca regala nada", con lo que rechazó que el Estatuto gallego actual limite esta opción.
A la Galicia de hoy, el nacionalista la ve "con los mismos problemas que en el 2009, pero con menos expectativas de solución, porque tiene un gobierno que abdicó de sus responsabilidades". Frente a ello, contrapuso el bipartito, del que consideró que "como gestión de gobierno, tuvo pocos errores; algunos sí, pero pocos".
Mirando al futuro, Quintana evidenció que hay "una reflexión pendiente tanto en el Partido Socialista, como en el BNG", para volver a reconducir las relaciones entre ambas formaciones, porque "la alternativa en Galicia, al PP, es plural necesariamente".
