Las prisas por atracar en primer lugar para conseguir el mejor sitio en puerto y un adelantamiento temerario en alta mar siembran el caos durante la llegada de dos embarcaciones a la isla de Ons. Uno de los buques, que iba por detrás, decidió acelerar y pasar por delante de su compañero, llevando a cabo una peligrosa maniobra para los dos barcos, ambos con pasajeros a bordo.
Los hechos tuvieron lugar el pasado martes a media mañana, cuando el barco Acuarium Cat, de la empresa Cruceiros Rías Baixas, estaba a punto de atracar en el muelle de la isla de Ons en su travesía desde Portonovo. Al mismo tiempo, proveniente de Bueu y un poco más alejado de la isla, se encontraba el Pirata de Canexol, embarcación que forma parte de la naviera Piratas de Nabia, quien comenzó a aumentar su velocidad.
En su versión, el patrón del Acuarium Cat sostiene que fue su compañero quien realizó una maniobra indebida: "Yo iba delante y él me alcanzó, y el que alcanza siempre es el que tiene que maniobrar, no hay más discusiones". Así, este niega la existencia de un episodio de pique entre ambos barcos, culpando únicamente al capitán del Pirata de Canexol por la arriesgada acción que protagonizaron.
"Yo iba delante y él me alcanzó, y el que alcanza siempre es el que tiene que maniobrar, no hay más discusiones", asegura uno de los patrones
Según cuenta, cuando el barco de Cruceiros Rías Baixas casi estaba alcanzando el puerto para hacer la maniobra de atraque, el presunto infractor aceleró y le adelantó por su costado de babor (lado izquierdo de una embarcación). De esta forma, el buque de Piratas de Nabia cruzó por la proa (parte delantera) del otro barco con su costado de estribor (lado derecho), un movimiento que, tal y como se establece en la legislación marítima, está totalmente prohibido. "Todo lo que no podía hacer, lo hizo".
Actuación "lamentable" y "bochornosa"
Desde la naviera Piratas de Nabia no respaldan la actuación de su patrón, mostrándose muy críticos con los hechos protagonizados por el marino. Así, desde la empresa asumen que los hechos ocurridos son completamente responsabilidad del trabajador de su empresa, definiendo como "lamentable" y "bochornosa" su actuación.
Según explican, la intención de este pasaba por buscar un descenso más sencillo para los pasajeros, motivo por el que pretendía llegar antes que su compañero a puerto y así ocupar el mejor sitio de la zona de atraque. No obstante, mantienen que estas intenciones no suponen una justificación de tal irresponsabilidad. "Fue una acción que consideramos del todo vergonzosa", señalaron.
La maniobra tuvo como testigos a los viajeros y una patrullera de la Guardia Civil
Consecuencias
Al conocerse este episodio, desde la Guardia Civil de Pontevedra se ha tomado la decisión de poner en conocimiento de la Autoridad Portuaria de Marín y de Capitanía Marítima, entes estatales con competencias en la zona, lo sucedido el pasado martes. El motivo es la supuesta comisión de varias infracciones, entre las que se encuentran el incumplimiento de la normativa en lo que respecta a las maniobras de atraque y la velocidad inadecuada que tomaron los buques.
Desde el instituto armado avanzan que se denunciará a ambas navieras, y la escena, que fue grabada en vídeo y difundida a través de las redes sociales, será investigada por las autoridades. Además, el pique no solo tuvo como testigos a los viajeros que iban en los barcos y a los que esperaban en el muelle para embarcar de regreso a tierra firme, sino también a una patrullera del Servicio Marítimo de la propia Guardia Civil que minutos antes había llegado a la isla.
Serán las diligencias que se practiquen las que determinen si la actuación de ambos barcos fue incorrecta o si, como asegura el patrón del Acuarium Cat, la temeridad es responsabilidad de uno de ellos, que trató de adelantar a su rival en el último momento.
