El Juzgado de Instrucción número 3 de Ourense ha decretado el ingreso en prisión para cuatro de las siete personas implicadas en la reyerta ocurrida el domingo por la noche a la entrada principal del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, que se saldó con un tiroteo en el que dos personas resultaron heridas leves.
La jueza ha dictaminado prisión para los dos hermanos, el padre y tío de uno de los clanes familiares que participaron en la reyerta familiar originada por supuestas desavenencias con miembros de otra parte de la familia.
Los otros tres han quedado en libertad con obligación de comparecer semanalmente en el juzgado.
Los siete detenidos pasaron a disposición judicial este martes acusados de un delito de tentativa de homicidio, tenencia ilícita de armas y amenazas.
Los detenidos son siete personas de una misma familia de etnia gitana, cuatro de ellas con antecedentes del poblado de A Fontela-Maside, en Ourense.
Al parecer, el origen del tiroteo es una relación sentimental no aceptada después de la escisión de un grupo, con vínculos parentales entre ellos, cuyos integrantes originariamente vivían de forma amigable en el poblado de A Fontela hasta que llegó el visceral enfrentamiento.
A la salida del edificio judicial, el abogado de la familia, Luciano Prado, explicó en declaraciones a los medios que los acusados no pueden aproximarse a menos de 500 metros del otro clan y además deben comparecer periódicamente en sede judicial.
La defensa sostiene que el único integrante de la familia que participó en los hechos fue el padre y que los disparos tenían ánimo "disuasorio" por "miedo" respecto a la familia que se encontraba dentro del complejo hospitalario.
Los arrestados llegaron esta mañana a la sede judicial custodiados en dos furgones por agentes de la Unidad de Prevención y Reacción de la Comisaría orensana.
Durante las declaraciones, un policía que no se encontraba de servicio cuando se produjeron hechos incriminó a uno de los miembros del clan como uno de los autores de los disparos, algo que el letrado de la defensa ha considerado "absolutamente falso".
El abogado dijo que su defendido llevaba una escopeta pero de fogueo.
Agentes de la Policía Científica identificó más de una docena de impactos de bala en la puerta acristalada y el vestíbulo del centro hospitalario.
