La tragedia por los múltiples atentados que ocurrieron el pasado fin de semana en Sri Lanka salpicó a la localidad pontevedresa de Pontecesures, que llora la muerte de María González Vicente y Alberto Chaves, una joven pareja residente en este municipio que se encontraba de vacaciones en el país y que fue víctima de los ataques que acabaron con la vida de unas 290 personas y dejaron más de medio millar de heridos.
Ella, de 32 años, era natural de Pontecesures y trabajaba en Padrón, en la empresa familiar, una firma especializada en equipación de trabajo. Él, de 31, nació en Rianxo, pero residía en la localidad natal de su novia, de donde también es originaria su familia paterna. Era empleado de Profand Vayalat, filial en India de la compañía Profand, firma de Vigo dedicada a los congelados. Se encontraba en el continente asiático cumpliendo sus obligaciones laborales y su pareja había viajado a Sri Lanka para pasar juntos las vacaciones de Semana Santa. Ambos se alojaban en el hotel Kingsbury, uno de los establecimientos sacudidos por las explosiones.
Fue el Ministerio de Exteriores español el que confirmó el fallecimiento de ambos en la jornada del lunes. Lo hizo a través de su personal de la embajada en España en Nueva Delhi desplazada a la zona. Las autoridades habían pedido a las familias de los jóvenes que aportasen fotografías de sus tatuajes para tratar de identificarlos y estos datos ayudaron a confirmar su identidad.
Los jóvenes pasaban la Semana Santa en la isla asiática, alojados en uno de los hoteles sacudidos por los atentados del pasado domingo
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue uno de los líderes políticos que trasladó su pésame a los familiares y confirmó que la embajada de España en India estaba "haciendo las gestiones para agilizar los trámites necesarios". La legación trabaja para obtener a la máxima brevedad los certificados oficiales por parte de las autoridades judiciales.
"UN SOCK". Aunque los allegados de las víctimas conocieron la fatal noticia a última hora del pasado domingo, esta no se confirmó hasta el lunes. "Isto é un shock", admitía el regidor de Pontecesures, Juan Manuel Vidal.
"Era unha rapaza moi coñecida e amiga persoal", apuntó sobre la joven el regidor. "Estou sorprendido e descolocado", admitía visiblemente afectado mientras organizaba la convocatoria de una junta de portavoces que se celebró a última hora de la tarde.
También el regidor de la localidad coruñesa de Rianxo, Adolfo Muíños, mostró su pesar. Recordó que Alberto Chaves era natural de la parroquia de Leiro y había trabajado en Central Lechera Gallega y en Conservas Garavilla. Además, había vivido una temporada en Londres, donde trabajó como recepcionista en un hotel.
Por su parte, la Diputación de Pontevedra ha mostrado a través de la redes sociales sus "condolencias" por las muertes de estos dos jóvenes, "víctimas de la sinrazón del terrorismo".
