La conselleira de Sanidad, Rocío Mosquera, ha valorado la puesta en marcha de las obras de ampliación y mejora del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) para "dar respuesta a las necesidades actuales", ante las críticas de los principales partidos de la oposición, PSdeG, BNG y AGE.
Mosquera compareció esta tarde en el pleno del Parlamento para explicar el proyecto del plan director del CHUO, que incluye la construcción del nuevo edificio de hospitalización, después de un "largo proceso", en el que hizo alusión a los "múltiples problemas" registrados durante la etapa del gobierno bipartito.
La titular de Sanidad, quien consideró este proyecto como el "modelo de futuro", insistió en que el hospital 2050 "va a marcar un antes y un después en los servicios sanitarios de Galicia".
Esta primera fase, que permitirá concentrar el bloque de hospitalización en un único edificio frente a los tres actuales, incluirá equipamiento energético con equipos de gas y caldera de biomasa, que convertirán al actual centro en un "hospital verde".
La comparativa del hospital en un espacio "verde" suscitó los irónicos comentarios del resto de grupos, que preguntaron a la conselleira qué tipo de hospital verde va a crear en medio de la ciudad.
Las obras del complejo hospitalario fueron adjudicadas el pasado mes de febrero por un importe de más de 41 millones de euros y ocupará 52.000 metros cuadrados de superficie, lo que permitirá incrementar, según Mosquera, la capacidad máxima de camas a 930 (116 más que las actuales).
Asimismo, el 60 por ciento de las habitaciones de las nuevas unidades serán individuales.
Con estas cifras, Mosquera confía en que la Consellería se pueda ahorrar un "12% del gasto corriente", a la espera de que se resuelvan los problemas judiciales.
Mosquera se refirió a la decisión de Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, dependiente del Ministerio de Hacienda, de ordenar paralizar el proceso de concesión de la gestión integral de espacios y desmembrar esta licitación en tres concursos diferenciados para la limpieza, seguridad y mantenimiento cuando estaba a punto de adjudicarse a la empresa Ferrovial.
A este respecto, recordó que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha desbloqueado el concurso de gestión integral de servicios por el que podrá seguir adelante el proceso de adjudicación del hospital de Ourense.
La portavoz de Sanidad del PSdeG mostró su "sorpresa y estupor" por la comparecencia de Mosquera, y comparó su gestión con el "cuento de la lechera" por pretender agrupar las adjudicaciones en un sólo contrato en el que ha salido beneficiada una gran multinacional, dijo, como Ferrovial.
Según Acuña, la gestión del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, es "temeraria e ilegal" por adjudicar el contrato de obras y servicios a través de una fórmula anulada por el Tribunal Administrativo Central del Ministerio de Hacienda, decisión -abundó- que "pone en peligro el arreglo del hospital de Ourense y los fondos da UE" para la compra de material "condicionados" a la ejecución de las obras.
Por ello, ha exigido "que se reponga de forma inmediata la legalidad del proceso de contratación".
Por su parte, la portavoz del BNG, Tereixa Paz, ha criticado el colapso de Urgencias en el hospital orensano, así como la denuncia de médicos del hospital comarcal de Valdeorras para referirse a la situación de la sanidad en la provincia.
"Casi preferimos dirigentes inteligentes en la Consellería que un hospital inteligente", advirtió la nacionalista.
Por su parte, el portavoz del PP, Miguel Santalices, ha defendido la gestión de la Xunta que "ha licitado las obras" después de años paralizadas.
"Hay que estar satisfechos", indicó el popular, quien acusó a los socialistas de "haber hecho lo posible por atrancar las infraestructuras".
La titular de Sanidad reiteró en su último turno de palabra el "muy buen sistema sanitario" dirigido a dar respuesta a las necesidades actuales.
