En el primer trimestre del año solo hubo cuatro autonomías que perdieron ciudadanos: Melilla (-0,12%), Extremadura (-0,07%), Ceuta (-0,06%) y Galicia. En esta última, no obstante, la variación es tan ínfima –87 personas menos– que hay que acudir a las milésimas para expresarla. Pero, profundizando, se observa que es la población foránea la que permite que la estadística gallega quede casi intacta, ya que mientras la de nacionalidad española descendió en 4.537 personas en estos tres primeros meses de 2023, la de nacionalidad extranjera aumentó y son 4.450 vecinos más. Es una tendencia que se constata en el conjunto del país.
El Instituto Nacional de Estadística (Ine) estrenó este martes la Estadística Continua de Población, con la que pretende proporcionar análisis trimestrales de población. Sus datos son prácticamente neutros en Galicia, con una caída del 0,003%, al bajar de los 2.699.716 habitantes a 2.699.629. No pasa de los simbólicos 2,7 millones desde el 1 de enero de 2020.
Las variaciones son centesimales en las cuatro provincias, con descensos de 230 personas en Ourense, de 124 en Pontevedra y de 122 en Lugo. Por su parte, A Coruña gana 389 personas. Y en todas ellas se repite la misma tónica: mientras decae la población española, crece la foránea. Es así como se compensa el saldo vegetativo negativo que arroja la diferencia entre los 3.349 nacimientos registrados hasta el 1 de abril y los más de 9.100 fallecimientos que se anotaban a esa altura del año.
El mayor ascenso de población extranjera se da en Lugo, donde este colectivo sumó 756 integrantes en el primer trimestre del curso, una subida del 3,86%. En A Coruña fueron otros 2.040 (+3,69%); en Ourense, 574 (+2,92%), y en Pontevedra, 1.080 (+2,41%).
De este modo, los vecinos de Galicia que tienen una nacionalidad distinta a la española alcanzan los 143.777, la cifra más alta que figura en este recopilatorio del Ine. Representan el 5,33% de los vecinos de la comunidad. Y en las provincias del interior la tasa es ligeramente superior a las atlánticas. En Ourense son el 6,64%, al suponer 20.212 de los 304.589 residentes en la provincia. Y en Lugo son 20.315 de sus 323.782 habitantes, el 6,27%. Por su parte, en A Coruña copan el 5,1% de sus 1.123.756 vecinos y en Pontevedra, el 4,84% de sus 947.502.
Si la comparativa se traza a un año, Lugo solo perdió 46 vecinos gracias a que su contingente foráneo creció en 2.897 personas. Las de nacionalidad española, son 2.943 menos que doce meses atrás. Eso sí, el balance global de Galicia fue positivo en 7.158 personas.
Desde Colombia y Venezuela
Esta nueva estadística da un apunte, además, de los principales países de donde procede la población recibida desde el extranjero. Y en las cuatro provincias, a la cabeza aparecen Colombia y Venezuela. Con datos redondeados a la decena, arribaron unos 1.290 colombianos –500 a A Coruña, 370 a Pontevedra, 260 a Lugo y 160 a Ourense–, y otros 1.280 venezolanos –530 a A Coruña, 340 a Pontevedra, 260 más a Ourense y 150 a Lugo–.
El último informe detallado del Ine, referido al 1 de enero de 2022, posicionaba entre las nacionalidades con mayor presencia a Portugal, con 14.655 vecinos; Venezuela (14.290), Colombia (10.065), Brasil (8.876) y Marruecos (8.809).
España supera por primera vez los 48 millones
La población residente en España aumentó en 136.916 personas en el primer trimestre de 2023 y, por primera vez en la serie histórica, pasó de los 48 millones. Se contabilizaron 48.196.693 habitantes. Y en términos anuales, el crecimiento poblacional estimado es de 590.184 personas, el más elevado desde 2008.
Esta tendencia se debió al incremento de personas de nacionalidad extranjera, que compensó la reducción de las de nacionalidad española. Así, el número de los primeros se engrosó en 149.530 personas este primer trimestre, hasta las 6.227.092. Por el contrario, los segundos disminuyeron en 12.614 personas. La población nacida en el extranjero fue de 8.307.497 ciudadanos. Es mayor que la de nacionalidad extranjera debido a los procesos de nacionalización.
Las principales nacionalidades de los inmigrantes en el primer trimestre fueron la colombiana –44.300 llegadas a España–, la marroquí (23.200) y la venezolana (21.500).
