Los concejales socialistas de Fene cesados optan por estar en la oposición

Desde el pasado miércoles, el BNG gobierna en solitario con cuatro ediles después de que los presupuestos rompiesen el acuerdo con el PSdeG y Somos Fene

Los tres concejales socialistas del municipio coruñés de Fene, cesados del gobierno esta semana por el alcalde, Juventino Trigo, al existir un desacuerdo en la elaboración de los presupuestos, han decidido permanecer a partir de ahora en la oposición y hacer "caso omiso" a las "puertas abiertas" ofrecidas por el regidor.

Desde el pasado miércoles, el BNG gobierna en solitario con cuatro ediles, después de que las cuentas municipales rompiesen el acuerdo con los tres representantes del PSdeG y con el concejal de la iniciativa ciudadana Somos Fene.

El secretario general del PSdeG de Fene, Joaquín Ayala, ha explicado este viernes en conferencia de prensa que el grupo municipal está "perplejo" por la decisión "unilateral" de Trigo, que "dice que siguen vigentes los acuerdos, pero lo que hace automáticamente es cesar".

El Comité Ejecutivo Municipal se reunió de urgencia el pasado martes, en el que adoptó un conjunto de decisiones que serán trasladadas a la asamblea extraordinaria y urgente de militantes que tendrá lugar este domingo 14 de agosto.

El PSOE critica que Trigo "no dio el brazo a torcer en ningún momento" en la cuestión de los presupuestos

"Es una sorpresa mayúscula para los socios que hicimos posible que fuera alcalde", ha ahondado Ayala, hasta el martes responsable de las áreas de Bienestar Social e Igualdad, que este viernes por la mañana ha estado acompañado por Antón Noceda, exconcejal de Obras y Servicios.

Ayala ha subrayado los "acuerdos, consensos y esfuerzos" que hizo el PSOE "desde el primer día" por "llevar a una persona de izquierdas a la alcaldía de Fene" y, asimismo, ha comentado que hasta el día del cese "nunca se conocieron divergencias" en el seno del gobierno.

En la misma línea ha criticado que Trigo "no es coherente" y que "fue él el que se empeñó y no dio el brazo a torcer en ningún momento" en la cuestión de los presupuestos, en los que "solo quedaban por hilar aspectos básicos".

El único aspecto que pretendían modificar era el de las competencias que determinaban las bases de ejecución para firma y conformar facturas, pues los socialistas opinan que las deben tener únicamente los concejales, no así los funcionarios.

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