El secretario general del sindicato español de maquinistas y ayudantes ferroviarios (SEMAF), Juan Jesús García Fraile, está convencido de que el maquinista del Alvia que descarriló el 24 de julio de 2013, Francisco José Garzón Amo, es, si cabe, "otra víctima" más de esta tragedia ferroviaria.
La sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña estimó los recursos de la Fiscalía y la Abogacía del Estado contra las imputaciones de doce ex cargos del gestor ferroviario, a los que se acusaba de la presunta comisión de un delito contra la seguridad colectiva y de ser hipotéticos partícipes en los de homicidio y lesiones.
García Fraile ha señalado, en una entrevista concedida a la Radio Galega, que si el único imputado es el conductor, "no reconoceríamos que hay cosas que fallan y que hay cosas que hay que solucionar y mejorar", con lo cual "iríamos para atrás".
Ha remarcado que lo que hubo es una concatenación de errores que, sumados, derivaron en el siniestro, por lo que la investigación ha de avanzar, y si Francisco José Garzón Amo se mantiene como el único imputado, "si no hay cambio, nuestra tristeza sería grandísima".
"Tenemos clarísimo que las circunstancias en las que esa línea estaba el día del accidente no eran las circunstancias en las que debía haber estado. Si solo se imputa a Francisco Garzón, es estará cometiendo algo gravísimo".
Es evidente, ha manifestado, que "hubo errores", y "no sabemos quiénes son los responsables de esos errores", pese a que se intuya, por lo que el SEMAF actuará según convenga "y no vamos a parar hasta demostrar que nuestro compañero fue si cabe una víctima más del accidente de Angrois".
