La Xunta devolverá lo que resta de las pagas extraordinarias devengadas a los funcionarios en 2012 y 2013 en un pago único en la nómina de agosto, pese a que la previsión inicial del Gobierno gallego era abonar una parte en septiembre y el resto en meses posteriores. Un cambio de criterio que el sindicato CSIF ha atribuido al "adelanto" de las elecciones autonómicas al 25 de septiembre.
A través de un comunicado, la central ha aplaudido el adelantamiento de este pago —que vincula al "peso de los empleados públicos a la hora de poner y quitar gobiernos"—, pero ha advertido de que esta medida "no es suficiente". "Quedan por recuperar muchos derechos laborales y acuerdos retributivos suspendidos por la Xunta", ha recordado.
Así, tras hacer hincapié en que los funcionarios ya mostraron "con creces" su "capacidad de sacrificio y solidaridad en los tiempos difíciles", CSIF ha incidido en que estos trabajadores mostrarán ahora de igual modo su "capacidad de exigir" lo que les "corresponde por derecho propio".
Cada empleado público recibirá de media unos 630 euros, 180 de la parte del complemento específico que les retiró en 2013 y otros 450 euros del 25% de la extra eliminada por imposición del Gobierno central en 2012.
Los funcionarios de la Xunta cobrarán unos 630 euros de las extras de 2012 y 2013 este mes
El sindicato CSIF atribuye el adelanto de la devolución de las pagas suprimidas, prevista inicialmente para septiembre, a un interés electoralista
