La única de las tres acusadas de un presunto secuestro a dos jóvenes rumanas a las que habrían obligado a ejercer la prostitución en Guísamo, en el municipio coruñés de Bergondo, ha sido puesta en libertad tras 14 meses en prisión preventiva mientras espera la sentencia del juicio oral.
La sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña ha acogido desde el martes hasta hoy el proceso contra tres acusadas por unos hechos que supuestamente habrían ocurrido entre el 29 de abril y el 3 de mayo de 2013.
De las tres acusadas, todas extranjeras, solo la que presuntamente convenció a las dos supuestas víctimas para viajar a España con la promesa de trabajar como limpiadoras en un restaurante estaba en prisión preventiva.
Esta mujer, de nacionalidad rumana y con un reciente cáncer de pecho, llevaba catorce meses en la cárcel por un supuesto riesgo de fuga, aunque tras la conclusión del juicio se ha decretado su puesta en libertad a la espera de que salga la sentencia definitiva, según han informado a Efe fuentes judiciales.
El fiscal, que ha apoyado esta puesta en libertad, pide para ella y para la que habría estado encargada del local entonces, que también era pareja del dueño, una pena de siete años por cada uno de los dos presuntos delitos de trata de seres humanos, es decir, catorce años.
