El fuego amenaza las casas en Pobra de Trives

Extinguidos el gran incendio de Santiago tras calcinar 825 hectáreas y el de Negueira de Muñiz tras destruir 50 ► Evacuados cuatro operarios en Pobra de Trives y Sarreaus, por inhalación de humo y un accidente de una motobomba ►Sigue activo el fuego de Cualedro y ya controlados o estabilizados los de Baralla, Vilardevós, Porto do Son, Arbo, Crecente y Sarreaus ► Arde también Quintá de Lor, en Quiroga
Un brigadista trabaja en una zona quemada por el incendio declarado en Sarreaus
photo_camera Un brigadista trabaja en una zona quemada por el incendio declarado en Sarreaus

La comunidad sigue en pie de guerra contra el fuego y, aunque en las últimas horas se han logrado victorias importantes —el gran incendio declarado en la parroquia compostelana de Fecha que llevaba desde el miércoles se dio por extinguido a las 20.44 horas de este domingo tras arrasar 825 hectáreas—, también han aparecido nuevos focos, principalmente en las provincias de Lugo y Ourense. En esta última sigue activo y sin estabilizar el declarado en el concello de Cualedro, en la parroquia de San Millao, que desde el sábado por la tarde ya ha destruido unas 450 hectáreas de monte.

SARREAUS. Y no es el único en suelo ourensano. A las 13.15 de este domingo saltaban las llamas en Sarreaus y, aunque la superficie afectada no llegó a sobrepasar las 20 hectáreas —las estimaciones iniciales hablaban de trece—, fue incluido en el boletín de la Consellería do Medio Rural porque dos de los brigadistas que trabajaban en su extinción tuvieron que ser trasladados al hospital de Ourense por inhalación de humo. Afortunadamente, a las pocas horas recibieron el alta.


El BNG propone una gestión forestal que "acabe" con el monocultivo de eucalipto para que el monte no sea un "polvorín" 


POBRA DE TRIVES. La jornada fue accidentada para los trabajadores de los equipos antiincendios y otros dos operarios, volcados en apagar uno de los últimos incendios declarados este domingo en el concello ourensano de Pobra de Trives, tuvieron también que ser evacuados. Uno de ellos por intoxicación por humo y el otro, por un golpe en una rodilla a causa de un accidente mientras conducía una motobomba. Ambos fueron derivados al hospital de O Barco de Valdeorras. En el lugar quedaron un técnico, dos agentes, ocho brigadas, tres motobombas, cinco helicópteros y un avión para tratar de sofocar un fuego que a las pocas horas ya superaba las 20 hectáreas calcinadas y que por la noche obligaba a decretar el nivel 2 de alerta por la proximidad de las llamas a las viviendas de O Seixo.

VILARDEVÓS. Sin salir de la provincia, en Vilardevós se dio por controlado el declarado en la parroquia de Soutochao, que consumió unas 54 hectáreas desde la madrugada.

NEGUEIRA DE MUÑIZ. Más rápida fue la extinción del de Negueira de Muñiz, en el concello de Lugo, que se registró a las 02.54 de la madrugada del domingo y quedó apagado a kas 18.31. Eso sí, entre tanto devoró 50 hectáreas de la parroquia de Barcela.


La conselleira do Medio Rural: "Los incendiarios deben percatarse de los daños humanos que pueden provocar"


BARALLA. En terreno lucense los equipos antiincendios mantienen a raya también las llamas en el concello de Baralla, parroquia de Neira de Rei, un fuego que está controlado desde las 00.50 horas y que ya ha destruido 54 hectáreas.

QUIROGA. A las 20.45 surgía un nuevo foco en la parroquia de Quintá de Lor, en Quiroga. Los vecinos apuntaron a que los rayos caídos por la tarde podrían estar detrás del fuego, que no amenazaba ningún núcleo de viviendas. A las 23.16 ya estaba contenido.


ARBO. El incendio más devastador del verano se mantiene controlado pero activo en la parroquia pontevedresa de Mourentán.. Desde la tarde del miércoles ya han ardido 1.583 hectáreas y pese al amplio despliegue de medios no puede considerarse todavía sofocado. 

CRECENTE. En suelo pontevedrés arde todavía Crecente, un fuego que también está ya bajo control. Se inició el miércoles por la tarde en Albeos y ya ha arrasado unas 300 hectáreas.

En toda Galicia son ya casi 7.000 las hectáreas de monte calcinadas en una semana negra que recuerda demasiado al terrible agosto de 2006. El viento, las elevadas temperaturas y la locura de unos incendiarios que intencionadamente ponen en peligro el patrimonio medioambiental y personal de los gallegos son un cóctel explosivo que hace mucho daño.

En este sentido, la conselleira do Medio Rural, Ángeles Vázquez, consideró este domingo que la comunidad gallega depende en cierta medida, en la lucha contra los incendios, del tiempo. Y es que julio, ha indicado, fue un mes de "muy buen tiempo" y, por ello, "la situación en el monte no fue mala". Con todo, ha precisado que, sobre todo, Galicia depende de que "los incendiarios se percaten de los graves daños humanos que pueden provocar".

Por su parte, la portavoz nacional del BNG y candidata a la Xunta, Ana Pontón, se ha comprometido a que el programa electoral de su partido incluirá un "plan integral de gestión forestal que acabe con el monocultivo de eucalipto". Pontón ha criticado que los montes gallegos se han convertido en un "polvorín que pone en peligro las vidas y los bienes públicos y privados cuando hay incendios". 

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